ESCULTURA

Veinte años sin Eduardo Chillida

Es uno de los escultores más influyentes del siglo XX con una brillante trayectoria internacional. Su legado permanece ahora en el museo Chillida-Leku el lugar en el que se mantiene vigente la obra del artista donostiarra.

Vanesa Durán

Gipuzkoa | 19.08.2022 10:24

Eduardo Chillida trabajando en una de sus obras
Eduardo Chillida trabajando en una de sus obras | Chillida-Leku

Eduardo Chillida nació en San Sebastián en 1924. Fue portero de fútbol en la Real Sociedad pero tuvo que dejarlo por una lesión. Inició la carrera de arquitectura en Madrid aunque nunca terminó sus estudios. En 1948 se trasladó a París y allí conoció de primera mano la obra de artistas como Picasso y entabló amistad con Pablo Palazuelo. En 1951 regresó al País Vasco. Comenzó a trabajar en la localidad guipuzcoana de Hernani en la fragua de Manuel Illarramendi, quien le enseñó los seculares secretos del arte de la forja. "Ilarik" (1951) fue su primera escultural abstracta. Está inspirada en las estelas funerarias y los aperos del pueblo vasco. Una de sus obras más emblemáticas está situada en San Sebastián. "El Peine del viento". Escultura que se asoma al mar y que recurre al viento y al agua intentado que todos formen parte de ella. Eduardo Chillida recibió numerosos premios y reconocimientos a lo largo de su vida.

Chillida-Leku

En sus últimos años creó el museo Chillida-Leku, en el caserío de Zabalaga (Hernani). Es una construcción tradicional vasca remodelada por el escultor y rodeada de un gran espacio de jardines que alberga la obra del artista.