La Diputación Foral ha declarado la existencia de la plaga de la procesionaria del pino (Thaumetopoea pityocampa) para 2023 en la comarca Cantábrica. Destaca por su mayor presencia en los municipios de Ayala, Amurrio, Artziniega, Llodio y Okondo y, además, del resto del Territorio donde se aprecien nuevas poblaciones que acabarán su ciclo larvario en el año 2024.En este sentido, el departamento de Sostenibilidad, Agricultura y Medio Natural ha declarado de utilidad pública la lucha contra esta plaga.
Al objeto de combatir los efectos de este insecto lepidóptero, principalmente, en pino insignis, pino silvestre y pino laricio, se ha constatado la necesidad de realizar tratamientos fitosanitarios a petición de entidades titulares de algunos montes afectados y también en otras superficies tanto de titularidad pública como privada.La finalidad de esta intervención es, por un lado, contrarrestar el deterioro del arbolado, y propiciar un equilibrado estado sanitario de los bosques de coníferas susceptibles a la procesionaria del pino. Y, por otro, paliar los efectos alérgicos a la población, así como a la cabaña ganadera.
La procesionaria del pino se encuentra en una superficie aproximada de 549 hectáreas de las masas forestales de la comarca Cantábrica. Estas masas presentan un grado variable de infestación con previsible evolución de la oruga a partir de estos focos existentes.
Debido a la dificultad para llevar a cabo medidas de control contra esta plaga desde tierra, tanto por la falta de infraestructura viaria y las dificultades orográficas de los montes para acceder a las masas, como por no poder lograr una adecuada cobertura al arbolado, éstos se realizarán por medios aéreos.La aplicación de los tratamientos sobre la superficie está prevista se realice a lo largo del mes de octubre.
LA PROCESIONARIA
El tratamiento procesionaria del pino es cada vez más demandado por los ayuntamientos de los municipios dada la peligrosidad para niños y mascotas (perros especialmente).Esta plaga forestal debilita al pino y favorece la acción de otras plagas.
Durante el verano, la mariposa pone los huevos sobre las agujas del pino. Al mes, salen las larvas que empiezan a alimentarse y a construir sus nidos.Los nidos se localizan en las ramas altas de los pinos pudiendo resistir temperaturas muy bajas.
Cuándo las condiciones climáticas son favorables las orugas salen del nido y bajan por el tronco formando largas filas y recorriendo los pinares, de ahí el nombre de procesionaria.
Los daños pueden extenderse de un árbol a otro, en algunas ocasiones produce urticarias y alergias que pueden ser muy graves para el ser humano.