Los Sanfermines se van a convertir en la primera gran fiesta que medirá su impacto medioambiental y cómo afecta su celebración al cambio climático. El Ayuntamiento de Pamplona ha puesto en marcha un procedimiento de cálculo y certificación de la huella de carbono para poder establecer un plan de reducciones factible de cara a nuevas ediciones. Para ello, analizará las emisiones de gases de efecto invernadero (GEI) que se producen durante esos nueve días de celebración, pero también en las jornadas previas y posteriores de montaje y desmontaje de escenarios e instalaciones, de limpieza y de recuperación de la ciudad.
La alcaldesa de Pamplona, Cristina Ibarrola, ha presentado en rueda de prensa esta iniciativa, en la que participa la certificadora internacional Bureau Veritas y la consultora especializada en sostenibilidad Ecoterrae. El objetivo de este procedimiento es conocer el punto de partida en cuanto al peso que suponen los Sanfermines en las emisiones de C02 y demás gases de efecto invernadero de la ciudad. De todos estos aspectos se va a medir las emisiones directas e indirectas que generen, analizando no solo la actividad en sí sino los consumos de energía importada que conllevan. En esta línea, se recopilarán datos, por ejemplo, desde las emisiones asociadas a la fabricación de productos que se usan en Sanfermines hasta el consumo de los vehículos para su transporte.
Datos de emisiones
El Ayuntamiento de Pamplona ya estableció en las fiestas de San Fermín de 2023 una calculadora de huella de carbono, dentro del Plan de Sostenibilidad Turística en Destino SF365, financiado con fondos europeos Next Generation EU. Esos datos, que ahora están en análisis, serán el punto de partida, de forma que en la segunda mitad de enero se entregará el certificado de huella de carbono verificada de los Sanfermines de 2023. La previsión pasa por que la certificación, de la mano de Bureau Veritas, pueda ser presentada en la Feria Internacional de Turismo, FITUR.
Con esos datos ya certificados sobre la mesa, el Consistorio elaborará una propuesta de reducción de emisiones, para implantarla en las fiestas de 2024. Meses antes de los próximos Sanfermines, se realizará una estimación inicial de cuál será la huella de carbono validada, es decir, la proyectada, con datos previos al evento, una vez aplicadas las mejoras y correcciones medioambientales previstas. Ya, durante la celebración de las fiestas de San Fermín el próximo julio, se realizará in situ el cálculo de la huella de carbono real.
Tras el análisis de las medidas implantadas y los resultados obtenidos, en septiembre de 2024 se obtendrá un nuevo certificado de huella de carbono verificado, que contendrá los avanzas que se hayan producido en cuanto a sostenibilidad y reducción de emisiones de gases de efecto invernadero
[[H3:Concienciación ciudadana]
De cara a lograr este objetivo, recuerda el consistorio pamplonés, es necesario contar con el apoyo de la ciudadanía y de las personas visitantes. La reducción de la huella de carbono de un macroevento urbano como los Sanfermines, con una proyección internacional y que cuenta con la presencia de cientos de miles de personas en acciones repartidas por toda la ciudad, necesita la implicación de todos. Por este motivo el Ayuntamiento realizaráa acciones concretas de concienciación sobre el respeto al medio ambiente y actitudes cívicas, que ayuden a reducir la generación de residuos y a evitar la emisión de gases de efecto invernadero a la atmósfera. El objetivo último es conseguir una reducción progresiva de la huella de carbono, buscando una mayor sostenibilidad medioambiental de unas fiestas multitudinarias.