Para cuando empiece en Vitoria el último partido de liga de Primera División en el que Osasuna buscará la clasificación europea, su filial, el Promesas, ya habrá terminado su encuentro contra el Ourense. Y no es menos trascendente que el del primer equipo, porque se juega mantener la categoría en Primera Federación. Una categoría importante, en palabras de su entrenador Santi Castillejo, porque "estar en esta categoría te acerca mucho al fútbol profesional y te hace mejor futbolista. Acerca a los de clase media, les hace competir contra unos rivales que acercan a primera división. Un Aimar Oroz te va a salir de donde sea, pero sí se ve con jugadores que se tienen que hacer fuertes para luego estar en el primer equipo. Te hace entrenar con jugadores fuertes, de mucho nivel, y luego competir con gente de mucho nivel. Si bajas de categoría ese crecimiento no será de la misma manera".
La permanencia está cara: Osasuna Promesas ocupa el primer puesto de descenso con 45 puntos. Eso habla de la igualdad y dureza de la categoría. Pero el Promesas ya le ha cogido el truco: en el último partido empató in extremis jugando con diez fuera de casa contra un rival directo salvando un punto muy importante. Castillejo ve bien al vestuario para el partido decisivo: "Saben que con una victoria se salvan. No tengo dudas de ellos".
Al menos uno de la plantilla, Asier Osambela, subirá al primer equipo la próxima temporada para cubrir la baja de Pablo Ibáñez. Para Santi Castillejo es un orgullo: "Yo contento de que sean cada vez más. Ya son 11 los que han subido al primer equipo desde que estamos aquí. Si subimos al menos uno cada año quiere decir que hacemos bien nuestro trabajo". Y define al que ha sido un futbolista clave en su plantilla: "Es un jugador muy completo. Puede hacer de seis porque tiene la fortaleza física para esas disputas aéreas. Se suelta muy bien para la llegada al área, tiene gol, capacidades físicas para hacer muchos metros. Un jugador bastante completo, el típico centrocampista de Osasuna, con ciertas dosis de físico pero también capacidad para llegar al área".
Al entrenador del Promesas, igual que a los jugadores, también le gustaría dar un salto a una categoría superior: "A todos los entrenadores nos gustaría entrenar en el fútbol profesional. Es normal, para eso estamos trabajando año tras año en estas categorías. Pero igual que para los jugadores, no es fácil. Los puestos son muy pocos y hay mucha gente que está muy preparada. Pero es nuestro objetivo y nuestra idea. Tenemos que ser ambiciosos e intentar llegar al fútbol profesional".
El apoyo del público será importante el sábado a partir de las 19:00 horas en Tajonar. "Este año la afición ha acudido más que otros años -se alegra Castillejo-. Me ha gustado. El sábado habrá un ambiente bonito, yo creo que se va a llenar. Estoy contento porque Aunque luego juegue el primer equipo en Vitoria va a haber un ambiente propio del último partido y siempre es importante jugar con tu gente en casa".