Mañana soleada en Badajoz. El Nuevo Vivero acogía el tercer enfrentamiento de las finales para ascender a Segunda División. Real Sociedad B y SD Amorebieta miraban ya desde la Segunda División este encuentro. Aquí se daban cita la UD Ibiza, presidida por Amadeo Salvo, y el UCAM Murcia CF, con el mismo entrenador con el que hace cinco temporadas se alcanzó el fútbol profesional, José María Salmerón.
La Universidad Católica alineaba a los mismos once guerreros que consiguieron vencer al FC Barcelona B. El once universitario estaba compuesto por Biel Ribas; Johan, Charlie Dean, Josete Malagón y Viti; Jannick y Rafa de Vicente; Alberto Fernández, Xemi Fernández y Liberto Beltrán; Jordi Sánchez en la delantera.
En frente, la UD Ibiza, que llegaba de empatar contra el Real Madrid Castilla, empezó con: Germán Parreño; Fran Grima, Goldar, Rubén González y David Morillas; Javi Pérez y Javi Lara; Kike López y Davo; Castel y Ekain en la ofensiva.
En los primeros compases del partido, los universitarios permitían a los celestes tener la posesión. El UCAM Murcia se replegaba en campo propio, pero en ningún momento se veía a la escuadra azuldorada descontenta con la situación. La primera ocasión del choque llegaba para el Ibiza. Castel disparaba cruzado y rebotaba en Charlie Dean. El rechace lo recogía Javi Lara para disparar sin mordiente a la portería de Biel.
Pese a que el Ibiza tenía la posesión, el más cómodo y peligroso era el UCAM. Con Jordi Sánchez presionando y robando a la defensa, o con Liberto y Alberto Fernández en los costados internándose y centrando. La más clara era para el de Moratalla, que remataba en el punto de penalti y obligaba a Parreño a lucirse. Biel Ribas protagonizaba, sin embargo, una intervención de mérito en un córner, justo antes del descanso.
En las gradas, los de las Islas Pitiusas eran más y más ruidosos al inicio, aunque los casi trescientos aficionados universitarios no dejaban de animar a su equipo y poco a poco iban ambientando el estadio con la mejora de rendimiento del UCAM.
El inicio de la segunda parte tenía más nervios que ocasiones, hasta que UCAM pidió su turno. A la hora de juego, Jannick filtraba un balón largo para Jordi Sánchez, que con un control perfecto lo intentaba de vaselina y se marchaba por poco.
Hasta que el minuto setenta aparecía en el cronómetro. Una jugada desafortunada para los universitarios acababa con un penalti a favor del Ibiza. Xemi derribaba a Kike López. Otra vez el problema de las penas máximas que está condenando al UCAM en las últimas jornadas. Ekain adelantaba al Ibiza.
Con el marcador favorable, los Baleares desplegaban buen juego. Davo disparo al larguero en el minuto 86’ tras una buena jugada de combinación. Mucha intensidad, pero pocas ideas en los murcianos.
Finalizó el choque en Badajoz con tristeza para el UCAM Murcia, que con más corazón que cabeza, no logró deshacer el resultado adverso.
El camino no ha sido fácil. Incluso con una racha irregular al inicio de 2021, la trayectoria del UCAM Murcia ha sido sobresaliente. Inició pletórico y finalizó la primera racha de forma inmejorable. En la segunda fase supo estar acertado para conseguir, cuanto antes, su billete a la fase de ascenso. Pero se ha ahogado en la orilla. En una temporada atípica, con 102 equipos en la tercera categoría del fútbol español, el compromiso y el trabajo de una plantilla que ha rendido en los tramos clave, se ha quedado sin el premio del ascenso. La próxima campaña competirán en la 1°RFEF, aunque ahora no haya ganas para hablar de eso en la parroquia universitaria.
