Estar en casa es importante y hay futbolistas que lo valoran. Eso es lo que le ocurre a Jesús Carrillo, jugador que vuelve a la Región para jugar en el Racing Cartagena. El nuevo proyecto está armando una plantilla para poder soñar con cotas altas, aunque desde el club piden paciencia y tranquilidad.
Lo cierto es que el propio Carrillo transmite calma con el objetivo de la campaña: "No nos podemos volver locos, pero yo soy ambicioso", aclara el de Alcantarilla, que también ha reconocido que el técnico Javi Motos ha sido clave en su llegada junto a la dirección deportiva.
Procedente del Numancia donde descendió de Primera RFEF, Jesús sabe que "el fútbol son momentos" y hay que aprovecharlos. Se muestra crítico, más maduro que en anteriores andaduras cerca de casa, y no rehúye la culpa: "Algunas cosas no las he hecho bien, tal vez por la juventud. Pero nunca está mal dar un paso atrás para dar dos hacia adelante. Seguiré luchando por mi sueño y nadie me lo va a quitar", declara el centrocampista.
Para él, caer con el conjunto de Soria de categoría fue doloroso, y que incluso ha estado "varias semanas sin dormir", pero ahora está ilusionado con lo que tiene por delante. Por dentro como centrocampista avanzado o por fuera como jugador de banda, pero siempre dispuesto a dar buen nivel en el Racing Cartagena de cara a la 2023-24.