La sala de gobierno del TSJ de Murcia investigará los motivos por los que se han malogrado cuatro causas de corrupción por no ser declaradas a tiempo complejas

"La sobrecarga de los juzgados y los plazos tan cortos de instrucción incrementan la posibilidad de errores"

La Sala de Gobierno del TSJ de Murcia ha decidido investigar qué ha pasado con cuatro jueces a los que se les pasó el plazo legal y han malogrado cuatro importantes causas de corrupción en la región de Murcia. La Sala de Gobierno ha acordado cursar visitas a los juzgados de Murcia, Lorca y Caravaca que se saltaron los plazos legales de seis meses para finalizar las investigaciones antes de adoptar medidas. El presidente del TSJ, Miguel Pascual del Riquelme ha recordado que los juzgados de instrucción de la región soportan cada año más de 80.000 causas de las que el 8% son declaradas complejas y advierte de que debido a la sobrecarga y a los plazos tan perentorios, tan cortos, establecidos por el artículo 324 de la Ley de Enjuiciamiento Criminal puede haber más errores. “La forma en la que se han estipulado los plazos máximos de instrucción incrementan las posibilidades de que se produzcan disfunciones y o errores”. Al revocarse la complejidad el caso La Sal que investiga una supuesta malversación multimillonaria en la desaladora de Escombreras, han sido anuladas todas las pruebas obtenidas desde el 7 de septiembre de 2018 que expiró el plazo para declarar compleja la causa. La Audiencia Provincial invalidó también las diligencias del caso Pasarelas de Puerto Lumbreras y absolvió al ex presidente, Pedro Antonio Sánchez. El caso Acal sobre la elaboración de informes hechos a medida por un despacho legal para expedientes urbanísticos también se archivó por completo. Y será archivado el caso King Kong sobre el auditorio de Cehegín para el que la Comunidad Autónoma otorgó una subvención de 9 millones de euros para su completa construcción y del que solo existen los cimientos.