El Pleno del Ayuntamiento ha aprobado la nueva ordenanza de ruidos con la abstención de MC que la considera como la “Ley del Silencio” para los cartageneros y el voto negativo de VOX que la valora como “confiscatoria”.
La Concejala de Medio Ambiente, Cristina Mora, matizaba que la ordenanza no hace “responsables” a los hosteleros de las molestias que puedan ocasionar sus clientes, sino que les pide “velar” para que no se produzcan y si no pueden controlarlos estaría la opción de llamar a la Policía Local.
Quedaría pendiente el mapa de ruidos y el calendario de eventos que dependerá de la evolución de la Covid en nuestro municipio, matizaba la Concejala.
El portavoz de la formación cartagenerista, José López, valoraba un norma que no ha contado con la participación de hosteleros y otros colectivos ciudadanos, y para la que tampoco se ha creado la prometida mesa de expertos.
López criticaba que el calendario de eventos para el eximente de ruidos no incluya las Cruces de Mayo y tachaba la ordenanza como una “Ley de Silencio” que hace responsables a los hosteleros del posible mal comportamiento de sus clientes que sería muy difícil de controlar por la falta de agentes de Policía Local.
Por su parte, el portavoz de VOX, Gonzalo Abad, también lamentaba que la ordenanza responsabilice al hostelero del comportamiento de la gente en la calle con sanciones que considera “confiscatorias” con multas de hasta 300.000 euros.
La edil de Medio Ambiente preguntaba a MC que si tan mala es la ordenanza porqué no han presentado alegaciones y negaba que sea “confiscatoria” cuando sólo cumple la Ley en cuanto al régimen sancionador.