No a las terrazas con pantallas de televisión y música externa ni a los cerramientos que acoten espacios públicos para mesas y sillas; un horario más restringido de apertura y cierre y multas más duras, de hasta 4.000 euros, para los hosteleros que incumplan estos y otros artículos de la nueva normativa.

Son algunas de las enmiendas de adición o sustitución que ha presentado el grupo municipal del BNG al borrador de la nueva Ordenanza Municipal de Veladores y que apuesta por un contexto más coercitivo en sus propuestas, que el que había marcado el gobierno local, para garantizar la convivencia entre los que disfrutan del ocio y los peatones, en una ciudad en la que hay ya más de 1.000 veladores, según el cómputo del propio ayuntamiento.

Así proponen que el espacio que ocupa cada terrazas quede bien delimitado, pero en otras enmiendas piden que eso no se haya con cerramientos como si fueran espacios acotados para el velador, es decir que se suspenda la posibilidad de incluir cierres desmontables, que incluye el borrador. También que los horarios de las terrazas sean de 11 a 00 horas en mayo, junio, julio, agosto, septiembre y primera quincena de octubre y no de 9 horas a 1 de la madrugada como propone el borrador de la nueva ordenanza.

Añaden una enmienda para que haya una sola persona encargada de servir solo a los clientes veladores cuando sean más de 10 mesas en el exterior.

El punto más llamativo es el que pide que el artículo 16 incluya una extensión a todo el documento de la prohibición de instalar televisiones o equipos de música en las terrazas.

En el tema sanciones es donde es más contundentes sin cabe la enmienda del BNG pues pide que la cuantía de las infracciones contra la ordenanza, que en el borrador de la misma son de 300 a 800 euros par faltas leves, pasen a ser de 1.000 a 2.000 euros. Las graves, que están contempladas en el borrador con sanciones de 750 a 1.500 euros, pide el BNG que pasen a ser de 2.000 a 3.000 euros.

Finalmente proponen que las infracciones muy graves con sanciones previstas de 1.500 a 3.000 euros, pasen a ser sancionadas con 3.000 a los 4.000 euros. La idea afirma el BNG, "es que "la prioridad sean los vecinos y vecinas de Ourense antes que las terrazas".