El Ourense regresaba a O Couto con la ambición de frenar su negativa secuencia de cuatro empates consecutivos ante su público, pero al contrario, se vio superado por un Sporting B que fue más efectivo de cara al marco contrario y supo llevar el peso de la confrontación.
El partido comenzó con dos certeras dianas, puesto que Iker Alegre transformó el primer disparo a puerta de los rojillos en gol, con un bote que hizo su chut inalcanzable para Dennis. La respuesta no se hizo esperar y el lateral Alberto González remató al fondo de la red un lanzamiento de córner del especialista Jony.
La anotaciones y la lesión del central ourensanista Portela convulsionaron un inicio que dio paso al control del filial gijonés, que aprovechaba la superioridad de Jony por la banda izquierda y el mayor dinamismo de sus jóvenes futbolistas.
Los anfitriones solo se acercaron en dos llegadas de Javi Hernández y, sobre todo, en un cabezazo de Borja Valle, pero fue Yacine el que perdonó la mejor oportunidad de los asturianos, al echar fuera un ventajoso remate con toda la portería para él.
Tras el intermedio no cambiaron mucho las propuestas de unos y otros. En el pesado terreno de O Couto, el Sporting B se movía mejor. Pablo Pérez hizo trabajar a Pato y, aunque un error del meta Dennis pudo habilitar al recién incorporado Óscar Martínez, fue necesario esperar hasta el minuto 60, para que Javi Hernández sacudiera la base del poste de la portería rival, con un espectacular chut a la media vuelta.
El Ourense quería ir a por el partido, pero los asturianos seguían ocupando mejor el terreno de juego y a la que Campillo falló en un corte, Jony puso la directa y definió con calidad para el 1-2.
El mazazo fue considerable para los rojillos, voluntariosos en su esfuerzo pero más grises en su fútbol que en jornadas anteriores. Óscar estuvo a punto de replicar, al porfiar por un balón dentro del área, pero no la enganchó bien y fue Jony el que forzó las dos mejores paradas del reaparecido Pato.
En medio del caldo de cultivo de la inestabilidad económica del club, los malos resultados de las últimas semanas se acumulan entre los problemas de un Ourense que ayer no tuvo su día.