Con solo pensar un poco, a cualquier ourensano se le viene a la cabeza alguna ocasión en la haya visto reventadas las tuberías de la calle Pardo de Cela, en la zona entre el pabellón de Os Remedios y la rotonda de Salesianos. Su antigüedad -la red de la red de la capital en general- y la densidad del tráfico que soporta esta zona son las causas principales de las continuas roturas. Una circunstancia que se ve agravada cuando existe un exceso de lluvia o por un aumento brusco de las temperaturas.
Esta última circunstancia fue la que ayer propició que de nuevo se abriera parte del asfalto de esta vía, tras romperse un tubería. La avería no afectó al abastecimiento en la zona -se realizó un bypass en el pabellón para que llegara el agua- aunque sí, y mucho, al tráfico: fue necesario desviar a los vehículos que querían salir de la capital.
Fuentes de la empresa encargada del servicio de agua en la ciudad, Viaqua, explicaban ayer que la avería se produjo al lado de otra anterior y avanzaban que la situación se normalizará a lo largo de la mañana de hoy, una vez que seque el asfalto. «Se trata de una zona que soporta mucho tráfico y en donde las tuberías son muy antiguas», detallaban ayer.
Aprovechando el parón lectivo de esta semana -la proximidad de Salesianos hace que el tráfico sea denso en distintos momentos del día- renovarán el tramo de tubería que va desde la rotonda hasta el pabellón.
Desde el Concello de Ourense informaban ayer de que en la zona afectada confluyen, ademas, tuberías de aguas pluviales con la red de potabilidad, lo que obliga a reforzar el asfalto con frecuencia.