El dispositivo 'Ola de frío' de Cáritas Diocesana de Mérida-Badajoz en Mérida dispondrá de 20 plazas y estará abierto desde este el jueves, 1 de diciembre, hasta el próximo 30 de abril.
El recurso, como ha explicado la coordinadora del área de Inclusión Social de Cáritas Diocesana, Ana Belén García Rubio, es de acceso directo e inmediato y procura una atención y cuidados básicos para reducir los daños de las personas que viven en la calle ante los meses de frío, evitando un deterioro de su situación personal.
Este dispositivo volverá a estar en la Calle Suárez Somonte de la capital extremeña y el horario de apertura será desde las 17,00 horas hasta las 09,00 horas, ofreciendo un servicio de ropero, ducha, lavandería, cena, desayuno y pernocta, en coordinación con el comedor social Beato Padre Cristóbal.
Este año el dispositivo contará con un plan de emergencia especial, ya que se ha estimado oportuno ampliar los horarios del recurso durante los días en los que el frío se presente de manera extrema. Además, los días señalados de Navidad permanecerá abierto 24 horas.
La delegación de servicios sociales del Ayuntamiento de Mérida, dirigido por Catalina Alarcón, colabora en este programa indicando que “el Ayuntamiento, en coordinación con la Policía Local, Policía Nacional y Cruz Roja, podrá derivar a él a las personas que lo puedan necesitar". Indica que este recurso cuenta con una inversión municipal de 6.000 euros, con el fin de “ofrecer un espacio que dignifica a las personas que viven en la calle, garantizando una atención básica y que evite un mayor deterioro de su situación personal. Es una oportunidad para romper el aislamiento de las personas sin hogar, en ocasiones inaccesibles y poder trabajar con ellas la motivación al cambio y salir de dicha situación”.
RED DE PROTECCIÓN SOCIAL
Durante el invierno pasado se atendieron a un total de 84 personas, de las cuales el 15 por ciento eran mujeres y el 85 por ciento eran hombres.
De ellas, 22 fueron derivadas a otros centros más específicos, ya que el recurso 'Ola de frío' es la puerta de entrada a la red de protección social, facilitando el acceso a derechos y mejorando la calidad de vida de las personas que se encuentran en una situación de calle.
"La finalidad es ofrecer un espacio que dignifique la situación de las personas que viven en la calle, una oportunidad para romper el aislamiento y poder crear vínculos para trabajar la motivación al cambio y salir de dicha situación", ha destacado Cáritas en nota de prensa.
