CONTROL DE AVES

Continúan las labores para disminuir el censo de palomas en las barriadas de la ciudad

Desde la empresa se ha iniciado una campaña de concienciación a la ciudadanía para reducir la población de palomas, que incide en la necesidad de no dar de comer a las palomas en la vía pública, ni desde balcones ni terrazas y no dejar a su alcance restos de alimentos

ondacero.es

Mérida | 22.09.2022 14:28

Paloma
Paloma | Ayuntamiento de Mérida

La empresa de control de población de palomas contratada por el Ayuntamiento, Fresur Control SL, continúa con las labores de control de estas aves en la ciudad colocando jaulas en distintas zonas de la ciudad con el fin de minimizar su censo y por tanto el daño que están ocasionando a la Salud Pública.

La campaña se inició considerando el diagnóstico de situación realizado por el Ayuntamiento de Mérida, tras la inquietud y malestar de las asociaciones de vecinos de la localidad y teniendo en cuenta que las palomas forman grandes grupos que ensucian las viviendas, que llenan de excrementos los tejados, terrazas y balcones, y que portan insectos y ectoparásitos como pulgas, chinches, ácaros de la sarna, etc.

En concreto, se trata de jaulas de malla electrosoldada fuerte, con unas dimensiones de 6 metros de largo, 3 m de ancho y 1,70 m de alto, aunque varían algunas, las cuales tienen una capacidad para abarcar a unos 300 individuos.

Disponen de bebederos automáticos, y están techadas al 50 %, protegiendo a las aves de las inclemencias meteorológicas. Los bebederos van conectados a un bidón de agua, de tal manera, que le proporciona toda el agua necesaria, en todo momento, lo cual es fundamental en la estación estival.

Así mismo, desde la empresa se ha iniciado una campaña de concienciación a la ciudadanía para reducir la población de palomas. Una campaña que incide en la necesidad de no dar de comer a las palomas en la vía pública, ni desde balcones ni terrazas y no dejar a su alcance restos de alimentos.

Con este simple gesto, señalan desde la empresa, se consigue que se mantenga un mínimo de reproducción. Esto es imprescindible para que cualquier otra medida de control que se emplea tenga éxito.

Las palomas, en las ciudades, pueden sobrevivir por sí mismas, alimentándose de insectos y gusanos, que encuentran en arboles y jardines. Hacen dos puestas al año, pero si están sobrealimentadas porque encuentran restos de alimentos en las calles o se les proporciona comida o pienso, pueden multiplicar sus puestas de cuatro a seis veces, esto supone un aumento muy rápido de su población con los consabidos problemas.