En un sorprendente comunicado emitido por el expresidente del Club Deportivo Badajoz, Joaquín Parra, ha querido mostrar no solo su resignación por la situación actual del equipo sino expresar, en una nota que contiene ocho puntos ni más ni menos, cómo fue su llegada al club y la difícil situación económica con la que se encontró desde que se hizo con el cargo de presidente en el año 2019, cuando cuenta que el Badajoz estaba encallado en un proceso de transformación SAD (Sociedad Anónima Deportiva) “en el que había que poner un millón y medio de euros”, pero que al llegar a la entidad resulta que “esos inversores de escasa o nula capacidad económica iniciaron reclamaciones al club por los daños y perjuicios que presuntamente les suponía su entrada con el capital social mayoritario”, según expresa Parra.
También ha expresado que tuvo que hacerse cargo de grandes deudas heredadas de una gestión anterior “poco profesional” pero que al menos pudo “salvar al club de su desaparición” y mejorar las instalaciones del estadio Nuevo Vivero, que dice que a su llegada “era un auténtico páramo abandonado a la suerte de botellones y vandalismo”, señalando que todas las inversiones y reformas realizadas “fueron pagadas hasta el último céntimo”.
Joaquín Parra continúa, por el momento, en una causa judicial de la que él mismo dice en este comunicado “salir indemne” y que se vio obligado a “malvender” sus acciones del club. Parra también informa que su familia ha sufrido “coacciones, amenazas de muerte y atentados contra su patrimonio”, Que fue “objeto de un engaño” y también ha querido disculparse con la afición.
Por último, en este comunicado destaca las carencias de los actuales inversores del Club Deportivo Badajoz y que ha intentado recuperar sus acciones y volver a gobernarlo “para sacarlo del concurso y de la lastimosa situación institucional que atraviesa”.
Y deja claro que “haría lo que estuviera en su mano para revertir la situación” ya que se siente querido y apoyado por la gran masa social del club y que le sorprende, como a cualquier aficionado más, que quienes dicen ser los propietarios no hayan tenido la decencia de presentarse públicamente”. Para terminar diciendo al final de su escrito que “van a tener quedemostrar en presencia de un juez si él cometió algún delito o sacar provecho en detrimento de los intereses del club”.