La Confederación Hidrográfica del Guadiana (CHG), la Junta de Extremadura y el Ayuntamiento de Badajoz han llegado a un acuerdo sobre la firma del protocolo dirigido a erradicar el nenúfar mexicano que afecta al Guadiana a su paso por la ciudad, un texto que firmarán en próximas semanas en torno a un proyecto dirigido al dragado parcial del río que se financiará entre fondos europeos Feder y del Gobierno.
Así se ha avanzado en una reunión mantenida este martes en la Delegación del Gobierno a la que han asistido el delegado del Gobierno, José Luis Quintana; el presidente de la Confederación Hidrográfica del Guadiana, Samuel Moraleda; el director general de Sostenibilidad de la Junta de Extremadura, Germán Puebla, y el alcalde de Badajoz, Ignacio Gragera, entre otros.
Quintana ha detallado que se ha tratado de una reunión "muy positiva" de trabajo entre las tres administraciones. Explica que la capital pacense tiene "un problema gordo" con el nenúfar mexicano que "no afecta a la salud del río" pero sí a una ciudad que vive de cara al mismo. Recuerda que desde la Confederación se vienen realizando una serie de actuaciones, como la práctica terminación de la permeabilización del azud de la Pesquera y el inicio de los trabajos para hacer lo propio en el de La Granadilla.
Quintana ha explicado que la Declaración de Impacto Ambiental (DIA) del proyecto de dragado parcial del río "va avanzando", "prácticamente" no ha habido alegaciones y la intención es que esté finalizada a últimos de año, para concluir "completamente" el proyecto en el primer trimestre de 2025, "y a partir de ahí ya se pueden hacer las obras oportunas", cuyo plazo estimado de duración es de seis años con un importe de 25 millones de euros. Y ha precisado que la obra en el cauce del río la va a ejecutar la CHG, que ha solicitado fondos Feder, mientras que la cofinanciación vendrá del Gobierno de España,
Por su parte, Ignacio Gragera, ha realizado una valoración "positiva" por las "intenciones" de las partes y al haber podido "constatar" que, dentro de lo que creían desde el ayuntamiento que son sus competencias, "hay vías y fórmulas de colaboración que les permiten poder apoyar "sin fisuras" el proyecto que se va a acometer, ante lo que acudían con preguntas a las que se les ha dado respuesta sobre financiación, el horizonte temporal de ejecución de la obra o las afecciones.
Desde el ayuntamiento, están para colaborar, ayudar y poner a disposición de las necesidades de la ciudad los medios necesarios, a la par que ha incidido en que hay que articular una "fórmula de colaboración" que implique que el consistorio pueda atender a ese interés público y así se va a hacer, sobre lo cual este martes ya se ha avanzado en modificaciones en la propuesta de protocolo que les permite "a todos más cómodos" con el lugar que va a ocupar cada uno en la ejecución material de la obra, que se va a dilatar "mucho tiempo" y provocará "muchos problemas".
Sobre el papel del consistorio, el alcalde se ha referido a aquellas afecciones indirectas que afecten al núcleo urbano, como entradas y salidas de vehículos, ordenación del tráfico, señalización o cesión de espacios de titularidad pública que se estimen necesarios para el depósito de lodos y materiales vegetales.
Germán Puebla ha mostrado igualmente una valoración "absolutamente positiva" porque "el Guadiana es patrimonio de Extremadura" y se tiene que cuidar y "sobre todo" darle una solución a la situación actual, ante lo que ha considerado que este martes se ha puesto "esa primera piedra" y ha señalado que la Junta apoya, da "todas las bendiciones" y colaborará en la medida de sus posibilidades y "sobre todo" de sus competencias para conseguir recuperar dicho río, cuya situación actual es "incalificable", para Badajoz y los extremeños.
Finalmente, Samuel Moraleda ha incidido en que la lucha contra las especies invasoras es "compleja" sumado a que se tiene que intervenir en un tramo urbano del Guadiana y en una zona ZEPA de especial protección, por lo que requiere "todas las cautelas" que hacen que se haya demorado "sobre todo" la tramitación de un "complejo" estudio de impacto ambiental que "está a punto de ver la luz".
Una vez que tengan la DIA, acomodarán el proyecto que tienen "prácticamente también terminada su redacción" y acoplarlo a las condiciones que "imponga" dicha declaración. A este respecto, ha compartido con el delegado que esperan que en el primer trimestre del 2025 lo tengan "todo listo" para empezar la obra, "si es posible", en otoño de ese año al tener que trabajar fuera del periodo biológico de octubre a febrero.