El delegado de Policía Local, Marco Antonio Guijarro, señala que “vamos aponer en marcha diversas campañas de control de la identificación de canes, así como de lucha contra el abandono y fomento de la adopción”. “Se estima que en el entorno de Mérida, y con los datos existentes de los últimos años, nos encontramos con unos 200 perros al año cuya procedencia se desconoce, la mayoría sin microchip”.
La Policía Local, el Refugio Municipal de Animales y con la colaboración y apoyo del voluntariado y asociaciones de protección animal, va a realizar una serie de campañas “dirigidas a la concienciación de la ciudadanía hacia una convivencia responsable, así como la interposición de denuncias por incumplimiento de las normativas vigentes, cuyo fin último no es otro que la consecución del abandono cero en nuestra ciudad”. De igual forma el ayuntamiento realizará campañas de difusión para favorecer la adopción de animales.
“A estos efectos, y adaptándose a la sensibilidad que la sociedad actual reclama para los animales, así como la legislación vigente; la Policía Local de Mérida ha creado un protocolo de actuación conjuntamente con el Refugio Municipal de Mérida que permita agilizar las adopciones, las denuncias por abandono y el pago de tasas por manutención de aquellos animales identificados, actualmente alojados en dicho centro, cuyos responsables no hayan ido a recuperarlos tras ser avisados”.
Siguiendo un plan hasta la posible entrada en vigor en 2023 de la futura ley nacional de protección, derechos y bienestar de los animales, “y con el fin de preparar a la sociedad emeritense para evitar sanciones que se prevén mucho mayores que las actuales, durante este año se realizaran campañas de control de identificación canina en diversos puntos de la ciudad”.
El ayuntamiento recuerda que la implantación del microchip es obligatoria desde los 3 meses de edad del perro, y que la infracción por tener al animal sin identificar y sin pasaporte conlleva también la ausencia de registro de los tratamientos preventivos obligatorios, como la vacuna frente a la rabia y la desparasitación para prevenir la hidatidosis, ambas enfermedades zoonóticas (transmisibles al ser humano) muy graves. La multa estipulada en la ordenanza municipal en estos casos puede oscilar entre los 751 y los 1.500 euros.
“Desde la Policía Local recalcamos nuestro firme compromiso con la protección de los animales. Fruto de una reciente colaboración con el voluntariado y las asociaciones de protección animal, a las que agradecen públicamente su labor altruista, se consiguieron rescatar cinco perros y cuatro gatos de una vivienda en la que se encontraban hacinados por uno de sus moradores que pudiera sufrir el comúnmente denominado Síndrome de Noé, un trastorno que lleva que a la persona que lo padece a acumular un gran número de animales de compañía en casa, aun cuando no les puede proporcionar los cuidados que necesitan”.