Las mascarillas han sido elaboradas por la comisión de fiestas de la localidad y está previsto que sean enviadas a la ciudad de Casma, en Perú, donde la misionera de la Diócesis de Orihuela-Alicante, Juana García, lleva adelante desde hace varios años, y con gran esfuerzo y dedicación, la Posta Médica Santa María Magdalena y la Residencia de Ancianos "San José".
Desde este proyecto, apoyado y financiado por la Fundación Diocesana Misión y Promoción, informan que hasta ahora esta residencia de ancianos ha vivido contagios teniendo que hacer un gran esfuerzo para salir adelante. Asimismo, la posta médica sigue con su atención, aunque con menos horario y doctores pero dando servicio a parte de la población que no tiene otro sitio donde acudir, ya que el hospital de la zona solo atiende a casos de COVID-19. “Nos supone mucho esfuerzo económico, puesto que hemos tenido que adquirir Equipos de Protección Personal para los médicos y enfermeras, resultando todo muy costoso para nuestro presupuesto” explica Juana García desde Perú.
Por lo que este cargamento de 1.400 mascarillas donadas por Bigastro irá destinado a este rincón del mundo donde se están viviendo momentos muy delicados y de gran
incertidumbre debido a la pandemia mundial que repercute en mayor medida en las zonas más desfavorecidas y con sistemas sanitarios deficientes o inexistentes.
Desde la Fundación Misión y Promoción de la Diócesis de Orihuela-Alicante se han destinado en el último año unos 60.000 euros para poner en marcha y mantener una decena de proyectos principalmente de promoción humana, salud, desarrollo infantil, principalmente en Perú pero también en Honduras, Ruanda, Camerún y República Dominicana.