El comisario jubilado José Manuel Villarejo ha acudido al juzgado que lleva el caso Erial y en el que será llamado a declarar como testigo más adelante y ha mantenido ante los medios de comunicación que la verdad "es la verdad" al ser preguntado si sostiene que el caso Zaplana fue una operación del CNI.
Villarejo estaba citado por el juzgado pero finalmente no se le ha podido tomar declaración y seguramente será convocado para otro día, según ha explicado a su salida de la Ciutat de la Justícia de València tras charlar con Eduardo Zaplana, quien le ha saludado y agradecido que haya acudido al juzgado.
Sobre si piensa que el caso Erial es un montaje contra el expresident de la Generalitat y exministro, ha manifestado que por respeto al tribunal prefiere no pronunciarse hasta su declaración, pero ha afirmado a continuación: "La verdad es la verdad, la diga Agamenón o la diga el porquero".
El comisario jubilado dijo en una comisión de investigación en el Congreso que el caso Zaplana fue una operación del CNI. Aseguró, a preguntas del diputado valenciano del PP Luis Santamaría: "Había un interés, no sé por qué, en destruir al señor Zaplana y se utilizó a un confidente del CNI sirio para ver las fórmulas".
Al respecto, este viernes ha comentado que cuando declare dirá la verdad "como siempre" a partir de su experiencia, aunque la gente se queje y diga que miente, y ha añadido que nadie le ha probado la falsedad de sus afirmaciones.
También ha asegurado que no sigue el juicio contra Zaplana y que tiene más de cuarenta causas pendientes, si bien ha señalado que sigue creyendo en el Estado de Derecho porque, si no, "es un caos".
Declaración Beatriz García Paesa
La gestora financiera Beatriz García Paesa, sobrina del espía Francisco Paesa, ha declarado este viernes en calidad de testigo en el caso Erial que no sabía que los fondos que gestionó en Luxemburgo fuesen del expresident de la Generalitat y exministro Eduardo Zaplana, como sostiene la Fiscalía Anticorrupción.
Ha confirmado que fue el entonces director general de la Policía, Juan Cotino, quien llevó en mano alrededor de 650.000 euros a Luxemburgo en 2001 para la constitución de dos sociedades, Imison y Fenix, a través de las cuales sostiene la acusación que se canalizaron comisiones ilícitas por la privatización de las ITV.
García Paesa ha declarado como testigo por videoconferencia desde Luxemburgo en la décima sesión del juicio del caso Erial, en el que se juzga, entre otros, a Eduardo Zaplana por supuestas "mordidas" en la adjudicación de las ITV valencianas y los parques eólicos.
Preguntada por si alguno de los procesados, al margen de Zaplana, le habló del exministro como persona vinculada con las empresas que manejó, esta gestora lo ha negado. "Nadie me habló jamás de él. Su nombre no fue mencionado por ninguno de los intervinientes".
Esta afirmación contradice lo apuntado ayer por el gestor uruguayo Fernando Belhot -que se hizo cargo de las empresas creadas por García Paesa a partir de 2009 y las trasladó a Uruguay- cuando indicó al tribunal que supuso que García Paesa debía saber que Zaplana era el titular real de esas empresas y fondos.
También al contrario de lo expuesto ayer por Belhot, García Paesa ha sostenido que no es posible que un acuerdo de administración fiduciaria sea únicamente verbal. "Al menos no en mi caso. Yo soy rigurosa, he de saber quién trabaja conmigo. Es una protección para mí y para la gente que trabaja para mí".
Sobre los fondos depositados en efectivo por Juan Cotino en Luxemburgo esta gestora ha explicado que el sobrino del que también fue presidente de Les Corts Valencianes, Vicente Cotino, ya trabajaba con una entidad bancaria en aquel país y que en aquella época "no se preguntaba sobre el origen del dinero".