Esta semana -el próximo domingo día 3 de julio- se cumple el 25 aniversario del mayor accidente laboral en la historia reciente de la Comunitat Valenciana. Hablamos de la tragedia del buque “Proof Spirit”, que explotó mientras se estaba construyendo en los astilleros de Unión Naval de Levante en el puerto de València. Murieron 18 trabajadores y otros 10 resultaron heridos.
La deflagración se produjo como consecuencia de la acumulación de vapores mientras cargaban combustible en los depósitos del barco, que estaba a punto de ser botado. La mayoría de los 18 fallecidos murió debido a una ráfaga de aire incandescente que les abrasó por dentro. Las bodegas del buque se convirtieron en una auténtica ratonera, como explicaba poco después del accidente uno de los 200 operarios que en ese momento se encontraban trabajando allí:
En 2005 el responsable de la sala de máquinas, su ayudante y el jefe de seguridad fueron condenados por homicidios por negligencia a penas de entre 18 meses y 2 años de cárcel. Pero ninguno de los tres entró en prisión al carecer de antecedentes penales. El buque “Proof Spirit” comenzó a construirse en 1996 en los astilleros de la Unión Naval de Levante y estaba destinado al transporte de líquidos químicos a granel.