La Inspección de Trabajo ha solicitado regularizar la situación de 2.283 riders de Glovo en Valencia así como la de unos 8300 en Barcelona. De esta forma la empresa tendrá que incorporar a estos trabajadores en nómina y que hasta el momento trabajaban como falsos autónomos.
La llamada Ley Rider, en vigor desde agosto de 2021, obliga a las plataformas digitales de reparto de comida a domicilio a contratar como asalariados a sus repartidores. Sin embargo al parecer Glovo, al igual que otras plataformas, mantienen a sustrabajadores como autónomos sin regular su situación puesto que se acogen a otros tipos de convenios.
El delegado sindical de Hostelería de UGT, Aaron Manjavacas, reconoce que Valencia está muy atrasada en la aplicación de la ley. Afirma que en algunos casos los salarios están por debajo del mínimo interprofesional.
Además asegura que el ochenta por ciento de los riders son venezolanos o sudamericanos que han aceptado dicho puesto de trabajo, tras obtener la nacionalidad o su permiso de residencia, y siendo éste su primer o segundo trabajo en España.