Pendiente estaba el Levante de las pruebas médicas a las que iba a ser sometido este lunes el delantero Mohamed Bouldini después de la lesión que ayer se produjo en la rodilla ante el Burgos y que hizo que el ariete abandonara el encuentro entre lagrimas. Un susto que ya Javi Calleja, en sala de prensa dejaba entrever que parecía no ser grave. Una lesión que el club en la mañana de este lunes ha emitido un parte médico en el que las noticias son positivas. "Las pruebas han descartado que el delantero sufra una lesión de gravedad, por lo que realizará trabajo específico y la incorporación al trabajo colectivo a lo largo de la semana dependerá de la evolución de las molestias", explicaba el parte médico.
Sin lesión no hay fichaje
Si la lesión de Bouldini hubiera sido grave el Levante UD, como anunció su propio técnico en sala de prensa tras el partido (1-0) ante el Burgos, hubiera sondeado el mercado estos dos días para reforzar el ataque, algo que a esta hora salvo giro inesperado no cambiará y el equipo no se verá reforzado.