Ante las crisis dicen que lo mejor es hablarlo, afrontarlo, y eso es lo que debe haber pensado el Valencia en bloque, porque ayer fue el día en el que se sucedieron las reuniones, reuniones que arrancaron en Paterna donde los capitanes encabezados por Dani Parejo se reunieron con el presidente valencianista Anil Murthy acompañado por el director deportivo César Sánchez donde se vertieron las diferentes opiniones que se tienen al respecto de la situación que vive el equipo y el club. Reunión en la que salió a relucir las declaraciones del capitán al acabar el partido en Anoeta donde avisó que debían de cambiar muchas cosas en el club para llegar al objetivo de estar en la Champions, declaraciones públicas que no cayeron de buen grado en el club de Peter Lim al realizarse a nivel público.
Una vez expuestas todas las visiones, el mensaje final fue uno, el de unión para afrontar un momento clave en la temporada.
Fue la primera de las reuniones, ya que la segunda se dio por la noche en una cena de toda la plantilla sin el staff técnico donde los capitanes trasladaron al resto de compañeros lo que se había hablado por la mañana, cena en la que también se pidió unión.
Una unión necesaria donde el Betis es ahora el mayor de los problemas en la previa de la vuelta ante el Atalanta donde se pretende remontar un 4 a 1 adverso