Hoy venía pensando en... lo de la venta de las acciones de Lim

Hoy venía pensando en… lo de la venta de las acciones de Peter Lim. Que una cosa es lo que nos gustaría que sucediese y otra bien distinta lo que vaya a pasar.

Durante todo el fin de semana han crecido los rumores de una posible venta. A todos mis amigos que me han preguntado a lo largo de este puente les he contestado lo mismo: “no sé si va a vender”. Porque a 16.000 kilómetros de distancia, con un tío al que apenas conocemos es muy difícil tratar de averiguar sus intenciones. Sensaciones gente interesada en comprar es otra cosa.

Yo creo que no tiene ninguna intención de vender. Esa es mi sensación y lo que transmite el Valencia de aquí. Que está molesto con los cánticos contra él, los insultos a su hija en instagram pero que no se plantea deshacerse de su paquete accionarial. Al menos de momento y salvo que reciba una oferta irrechazable.

Porque para comprar el club además de interés hace falta dinero, mucho dinero. Para empezar 200 millones por las acciones y aguantar una deuda de la empresa de 500 millones de euros. Eso sin contar que hay un estadio por acabar, cien millones, y unos plazos de una ATE que cumplir ya que de lo contrario pierdes un activo por valor de 120 millones de euros. Además con una plantilla debilitada y con pocas vistas de jugar en europa a corto/medio plazo. No es el mejor escenario para atraer a ningún inversor.

Me encantaría sumarme a la ola esa que habla de venta. Es un deseo que tenemos todos. Pero si algo soy en la vida es precavido: y una cosa es el deseo que albergamos y otra bien distinta la realidad. Además, vender al mejor postor no significa necesariamente que las cosas vayan a cambiar para bien…