A los socialistas no le ha gustado nada que Ribó haya llevado a la junta local de gobierno local un informe de alegaciones contrario a la nueva terminal de contenedores prevista en la ampliación del puerto, en la que se reclama al Gobierno de España una nueva declaración de impacto del proyecto. El PSPV ha acabado absteniéndose y no ha apoyado la moción, y acusan a Compromís de no haber querido consensuar una postura conjunta.
Otro motivo de confrontación ha venido por el fraude en la EMT. Los socialistas han presentado a la junta una moción urgente que pedía informar del asunto al Banco de España y al Tribunal de Cuentas. Compromís se ha negado a aceptar su inclusión en el orden del día. Y el tercer motivo de conflicto ha sido la decisión de Compromís de nombrar a un independiente para la alcaldía pedánea de Benimámet. Algo que el PSPV considera una deslealtad y un falta de respeto al resultado de las elecciones en la pedanía.
A la vista de todo esto la vicealcaldesa y portavoz municipal del PSPV, Sandra Gómez, ha llegado a acusar a Ribó y a Compromís de tratar de gobernar "por decreto y el solitario". Por su parte desde Compromís, el vicealcalde Sergi Campillo ha explicado respecto al desencuentro en torno a la ampliación del puerto que están actuando "por el interés general de la ciudad" ante un proyecto que puede tener un grave impacto. Además ha señalado que la moción sobre la estafa en la EMT se ha presentado tan a última hora que han decidido aplazar su debate para la próxima junta. Y sobre la alcaldía pedánea de Benimámet ha dicho Campillo que llevaba seis meses bloqueada y era necesario nombrar ya a alguien para el puesto. El vicealcalde ha preferido restar importancia a todas estas discrepacias y niega que haya crisis en el gobierno local.