La situación está "descotrolada", según el sindicato Acaip-UGT

La cárcel de Picassent suspende cualquier actividad no esencial ante el aumento de casos de COVID

La dirección de la cárcel de Picassent ha decidido suspender cualquier actividad no esencial en el centro penitenciario ante la extensión de los contagios de coronavirus entre reclusos y trabajadores. El sindicato de funcionarios de prisiones ACAIP-UGT asegura que la decisión llega tarde porque la situación está "descontrolada".

ondacero.es

València | 27.01.2021 13:52

Entre otras medidas, la dirección de la prisión de Picassent se ha suspendido todas las comunicaciones de los internos, así como las salidas de permiso o programadas, y solo se permitirá el acceso al personal. Según los responsables del centro penitenciario, actualmente hay 133 casos positivos, la inmensa mayoría asintomáticos, mientras que el número de internos confinados es de 473. En cuanto a los trabajadores, hay 16 positivos y 27 en cuarentena.

Por su parte el sindicato de funcionarios de prisiones ACAIP-UGT asegura que estas medidas responden a la aparición de un segundo brote que afectaría al menos a 90 internos. A principios de enero se detectó un primer foco con 66 contagiados.

Situación descontrolada

Desde este sindicato su portavoz en la cárcel valenciana, Alberto Téllez, ha lamentado que las decisiones de la dirección llegan "demasiado tarde" porque en estos momentos el virus circula "descontroladamente" por el centro penitenciario. Según ACAIP-UGT "prácticamente en todos los módulos se han detectado casos positivos o confirmados, y aún se está pendiente de la realización de pruebas a muchos internos". A su juicio, "no se adoptaron medidas drásticas y tajantes cuando se detectó el primer brote de importancia a principios de enero y por eso ahora se ha llegado a esta situación".

Además, el sindicato ha criticado que ahora, con los nuevos contagios, los trabajadores que han estado en contacto directo con los internos del módulo "se van a ver atrapados en un limbo administrativo para ver quien les hace pruebas diagnósticas". "Es indignante que los trabajadores públicos tengan que buscarse la vida literalmente para ver si están contagiados o no por competencias administrativas, teniendo que sufragar ellos mismos en muchos casos el coste de las pruebas diagnósticas", han criticado. A su entender, debe de ser la dirección del centro la que, aprovechando las buenas relaciones con la Conselleria de Sanidad, gestione la realización de pruebas diagnósticas a todos los trabajadores que sean contactos estrechos laborales.