Los datos de ocupación hotelera de la semana pasada en la Comunitat Valenciana vuelve a estar entre 20 y 30 puntos por debajo de las ocupaciones habituales para estas fechas en épocas prepandemia. Así lo ha trasladado en un comunicado la patronal hotelera Hosbec quien advierte que “la recuperación turística está tardando más de lo previsto en llegar” y que ésta será “proporcional a la evolución sanitaria”.
La ocupación en los destinos de la Comunitat en la primera semana de noviembre ha oscilado entre el 50% y el 60% de media. Los fines de semana se ha producido un repunte, pero en el mejor de los casos, Valencia, no pasa del 76%.
En lo que respecta la media semanal es Valencia con un 61,5% el destino que registra mejores datos de ocupación, seguido de Benidorm con un 55,1%, Costa Blanca (sin incluir Benidorm) con un 51,4% y Castellón con un 44,4%.
La ocupación durante los fines de semana la vuelve a liderar Valencia con un 75,7%, seguida de Benidorm con un 63,3%, Castellón con un 62,1% y Costa Blanca (sin Benidorm) con un 61,6%.
Por procedencias es el mercado nacional el mayoritario en todos los destinos de la Comunitat salvo la Costa Blanca donde el turismo internacional supone el 52,9% del total. Destaca también el incremento del turismo británico como primer destino internacional en Benidorm que sube 10 puntos porcentuales respecto a la semana anterior y acapara el 36,1% del total de la ocupación.
Hosbec atribuye estos resultados, además de a los efectos derivados de la pandemia, a “el vacío del Imserso” que ya se está dejando notar “de manera clara” en destinos vacacionales como Benidorm.
Ante esta perspectiva el presidente de Hosbec, Toni Mayor, ha advertido que el sector, que encara ahora la primera fase de la temporada baja, “va a sufrir mucho”.
