Benidorm activará las restricciones de la Zona de Bajas Emisiones en enero, cumpliendo la ley estatal que obliga a ponerla en marcha, en ciudades con más de 50.000 habitantes
Así lo ha anunciado esta mañana el acalde de Benidorm, Toni Pérez, quien ha remarcado que habrá flexibilidad a la hora de activar este programa, que tendrá un periodo de testeo, de prueba, y que no excluirá los accesos, siempre que quienes entren en la ciudad tengan un destino concreto y soliciten permiso a través de una aplicación que operará desde el teléfono móvil.
La aplicación estará disponible cuando se terminen de instalar todos los dispositivos tecnológicos para el control de vehículos durante el mes de diciembre. Y También habrá una oficina de atención al vecino, para que puedan consultar cómo operará la aplicación, que sugerirá igualmente lugares donde poder estacionar el vehículo, como son los parkings disuasorios. Antes de su activación tb se modificará la ordenanza para regular las nuevas sanciones.
En total la Zona de Bajas emisiones afectará a 74 hectáreas de Benidorm, divididas en la zona centro, Levante y Poniente. El alcalde ha destacado que a priori no supondrá grandes cambios, puesto que el Ayuntamiento de Benidorm ya comenzó a trabajar en la peatonalización y en la restricción al tráfico rodado de algunas zonas antes incluso de la aprobación de la ley estatal que ahora lo impone.
El programa tiene varios objetivos, que buscan mejorar la calidad de residentes y visitantes, mejorando el medio ambiente mediante la disminución del tráfico y el uso de vehículos poco contaminantes.
Cabe recordar que implementar una ZBE antes de finalizar el año es una obligación la Ley de Cambio Climático y Transición Energética, aunque Benidorm ha pedido una moratoria, que aún no se sabe si se aprobará. El municipio ha obtenido más de 3 millones de euros de fondos europeos para poder desarrollarla.