La Junta Local de Gobierno del Ayuntamiento de Elche ha aprobado este viernes iniciar el expediente para solicitar a la Conselleria de Cultura la declaración de arroz con costra, uno de los principales platos de la gastronomía ilicitana, como Bien de Interés Cultural Inmaterial de la Comunitat Valenciana.
Así lo ha anunciado el portavoz de la Junta Local de Gobierno, Héctor Díez (PSOE), quien ha destacado la importancia y contribución del arroz con costra, el plato por excelencia de esta ciudad elaborado con arroz y huevo, a la gastronomía local. Junto con el Consistorio, colaborará en este expediente la Asociación Amigos del Arroz con Costra, que desde los años 80 trabaja por la conservación y promoción de este plato tradicional y de fuerte arraigo en el municipio. Este plato se remonta al año 1490, cuando aparece en el recetario de Ruperto de Nola, cocinero real de Fernando Nápoles, aunque por aquel entonces su nombre era 'arròs en cassola al forn' (arroz en cazuela al horno), dado su origen catalán y su elaboración en el antiguo Reino de Aragón.
En Elche, el arroz con costra se come desde mediados del siglo XIX, aunque, con motivo de la Guerra Civil y la Postguerra, y con ello los años de la hambruna, se produjo una paralización en su elaboración. Fue en este momento cuando pasó a llamarse costravuida, ya que apenas contenía arroz y algo de huevo en ocasiones. Es en la década de los años 60, ya en el siglo XX, cuando se hace muy popular gracias al auge del sector del calzado: muchos emigrantes llegan a la ciudad ilicitana para trabajar y abren restaurantes en los que incluyen en su carta este plato. A partir de esa época, el arroz con costra comienza a degustarse por primera vez fuera de las casas. Su popularidad le incluyó en 1974 en los folletos de promoción gastronómica elaborados por el entonces Ministerio de Información y Turismo, el mismo año en el que en Elche se celebra el primer concurso de arroz con costra.
Belenismo
Por otra parte, el gobierno local se ha sumado a la petición de otros municipios valencianos para que el Belenismo sea declarado Bien de Interés Cultural.