Las próximas 72 horas se presentan intrigantes en el Elche CF. El mercado de invierno bajará su persiana el lunes, a las doce de la noche, y ese el plazo que tiene Christian Bragarnik para apuntalar la plantilla de Francisco. También es el margen con el que cuenta para dar salida a los jugadores que no son imprescindibles y que han mostrado interés por contar con más minutos en otro equipo. En ese grupo se encuentra el portero Axel Werner, que saldrá cedido al Arsenal de Sarandí.
Werner llegó al Elche a última hora para asumir el rol de tercer portero. Siempre de forma profesional, sin generar conflicto alguno, estuvo a la sombra de Edgar Badia y Kiko Casilla. La baja médica del portero cedido por el Leeds United, primero por un esguince de tobillo y más tarde por el COVID, permitió que Werner tuviese la oportunidad de estrenarse en la Copa del Rey ante Almería y Real Madrid. Lo hizo con dos buenas actuaciones, más allá de la salida en falso que supuso el 1-2 del Madrid y su pase a los cuartos de final.
El portero argentino, ex del Atlético de Madrid, mejoró las dudas que se habían generado con su fichaje y se había postulado, incluso, como primera alternativa a Badia. Bragarnik le firmó para tener portero de futuro a sabiendas que Edgar Badia y Kiko Casilla terminan contrato. El primero podría renovar, en caso de permanencia, por partidos mientras que el segundo no entra en los planes para la próxima temporada.
Ahora el futuro de Axel Werner estará en el Arsenal de Sarandí, donde también jugó cedido como franjiverde Willy Caballero, hasta el 30 de junio y a partir de ahí renovaría para cumplir el año de contrato que le queda. La intención es sumar más temporadas a su vínculo con el club.
La dirección deportiva tenía claro que uno de los dos porteros suplentes debía dejar una ficha libre y ante la negativa de Kiko Casilla a salir se ha precipitado la cesión de Axel Werner a la liga de su país.