Los regantes urgen las obras del postrasvase Júcar-Vinalopó

La falta de agua a precio asequible provoca el abandono de 600 hectáreas de cultivo en la SAT San Pascual de Elche

La entidad agraria de la margen izquierda del Vinalopó dispone de 1.000 hectáreas de las que a día de hoy se cultivan 400, que se riegan con agua comprada en Villena “a precio de oro”

David Alberola

Elche | 24.03.2017 06:00

El abandono de la extensión de cultivo ha sido paulatino en las últimas dos décadas. Hace veinte años la disposición de agua de calidad y a precio asequible en la zona hizo proliferar las extensiones agrarias en la zona de San Pascual, que llegaron a ocupar 1.000 hectáreas, sin embargo actualmente el agua se compra en Villena pagándose a 60 céntimos el metro cúbico de agua, frente a los entre 18 y 25 céntimos que se estima costará la proveniente del trasvase Júcar-Vinalopó: “Tenemos agua de calidad pero muy cara lo que hace que los cultivos no sean rentables”, ha lamentado Jaime Campello, presidente de la SAT San Pascual, que ha urgido a la Generalitat Valenciana a ejecutar las obras del trasvase que son de su competencia para facilitar que el agua procedente del río Júcar pueda llegar a la zona.

Los regantes de SAT San Pascual critican que el procedimiento para ejecutar las obras del postrasvase está prácticamente “paralizado” y, tras insistir en que se cuenta con un proyecto redactado, han pedido agilidad al gobierno valenciano para que las obras del trasvase del Júcar en la margen izquierda del Vinalopó sea una realidad de inmediato.

Las obras de modernización de regadíos en la SAT San Pascual han entrado en su recta final en aquellas zonas en las que aún están en marcha. El proyecto ha supuesto una inversión de algo más de dos millones de euros por parte de los comuneros de la entidad agraria, quienes insisten en que ellos han hecho su tarea y ahora es la Administración autonómica la que tiene que cumplir con su parte.