OPINIÓN | 'El maestro infiltrado'

Se agudiza la falta de docentes en Secundaria

El periodista José Francisco Michelli analiza la cobertura de plazas de profesores de enseñanza Secundaria a través de la llamada bolsa de dificil cobertura y la situación de falta de docentes que existe en algunos institutos de la Comunitat, también de Elche

ondacero.es

Elche | 26.02.2018 09:45

José Francisco Michelli
José Francisco Michelli | Onda Cero Elche

Parte del alumnado del IES Nit de l’Albà pasará otra semana sin profesor de valenciano, porque la Conselleria de Educación no ha podido adjudicar la plaza a través de la bolsa de difícil cobertura, por tercera semana consecutiva. En una situación similar a los estudiantes ilicitanos, se encuentran los alumnos del IES La Cañada de Valencia, que también tienen más de un mes sin docente, y los del IES Nuestra Señora de la Cueva Santa de Castellón, cercanos a cumplir los dos meses sin recibir clases de valenciano.

La falta de docentes en Secundaria se está convirtiendo en uno de los quebraderos de cabeza de la era Marzà. La bolsa de difícil cobertura empezó a funcionar en mayo de 2015 con el objetivo de cubrir vacantes y sustituciones docentes con rapidez, para ofertar las plazas que no pudieran ser ocupadas a través de las bolsas de trabajo ordinarias. Desde entonces y hasta diciembre de 2017, la administración había ofertado casi 2.000 puestos docentes (*).

Sin embargo, llama la atención que en el primer trimestre de este curso 2017/2018, la Conselleria de Educación convocó más de 1.100 puestos, un 140% más que en todo el curso 2016/2017, cuando fueron ofertadas casi 800 plazas. Una de las explicaciones que han ofrecido tanto los sindicatos como la propia administración es que han aumentado el número de vacantes a causa de las jubilaciones, a lo que se suma la desactivación de la bolsa de muchos interinos por diversos motivos.

Como veis, el tema es bastante complejo. La administración se siente muy satisfecha por cómo se ha gestionado la bolsa de difícil cobertura. De acuerdo al secretario Autonómico de Educación, Miguel Soler, la actual Conselleria ha logrado reducir el tiempo promedio de sustituciones de los casi 20 días que tardaban en la era del Partido Popular, a las menos de dos semanas de espera de la actualidad, que permiten garantizar el derecho a la educación del alumnado (**).

Y volvamos al mes que llevan los alumnos del IES Nit de l’Albà sin profesor de valenciano. Una situación similar ocurrió a inicios de curso con una vacante de Audición y Lenguaje en el IES Tirant Lo Blanc de nuestra ciudad. No se trata de casos aislados, es cada vez más frecuente encontrarse con esta escasez de docentes en Secundaria, muy diferente de la etapa de Primaria, donde las sustituciones y vacantes son cubiertas con una mayor regularidad y precisión.

Hay más. El caso de Secundaria se agrava porque las oposiciones serán en junio del 2019 y hasta entonces no habrá posibilidad de ampliar el número de docentes de manera significativa. Y es que la administración no ve como una opción abrir las bolsas ordinarias existentes, como ocurre en otras comunidades, sino que las nuevas incorporaciones solo pueden producirse a partir de las convocatorias semanales de las bolsas de difícil cobertura, que se limitan a los días viernes durante un par de horas.

Se puede afirmar que de parte de la administración ha habido voluntad y un plan específico para cubrir las plazas vacantes y las sustituciones, pero también es cierto que, con el paso del tiempo, estas medidas están resultando insuficientes, en el caso de Secundaria. Quizá el punto más controvertido es que las bolsas de difícil cobertura se han convertido en la regla y no en la excepción a la hora de cubrir las plazas de Secundaria. Quizá la administración deba pensar en una política alternativa antes de que la situación se agrave, aún más.

(*) He realizado un análisis a las convocatorias de difícil cobertura desde mayo de 2015 hasta diciembre de 2017. Son datos exclusivos.

(**) Entrevista realizada al secretario Autonómico de Educación, Miguel Soler.