OPINIÓN

Edificant promesas

Santiago Soriano, docente del colegio Julio María López Orozco, pone frente a frente los anuncios del Consell con la realidad de las infraestructuras educativas de Elche

ondacero.es

Elche | 02.03.2018 09:53

Santiago Soriano
Santiago Soriano | Onda Cero Elche

El Gobierno del Pacto del Botánico cumplirá tres años el próximo mes de mayo. La eliminación de los barracones, la rehabilitación de los centros y la creación de infraestructura nueva, fueron promesas que se escucharon en la lejana campaña electoral de 2015. Pero el discurso se mantuvo cuando Vicent Marzà asumió el cargo de conseller de Educación.

Y seguimos en campaña electoral. En octubre, Marzà y el President Puig anunciaron el lanzamiento del Plan Edificant, una alianza entre la Generalitat y los ayuntamientos para resolver los problemas de la infraestructura educativa. Hubo bombos y platillos. Un mes después, el consistorio ilicitano se sumó al plan del Consell para gestionar las futuras obras. Una alborada en pleno otoño.

Llegó diciembre y la campaña siguió su curso. El secretario Autonómico de Educación, Miguel Soler, dijo que la construcción del Instituto número 11 de Elche comenzará antes de que finalice 2018 y que se harán “muchísimas obras menores” durante el próximo verano. Por último, hace pocos días el President Puig afirmó que en nuestra ciudad se invertirían 20.000.000 de euros y al IES se sumaría la construcción de dos colegios: el número 37 y el nuevo 'Virgen de la Luz'.

Y ahora hablemos de hechos. En Elche, parte del alumnado de los colegios La Paz, Las Bayas, La Galia, Els Garrofers y Valverde, así como del IES La Torreta, siguen recibiendo clases en barracones. También es un hecho que la cuantía para que los centros pidan inversiones era de 9.000€ con el anterior Gobierno del PP, mientras que el tripartito elevó la cifra a 30.000€ en 2017 y a 50.000€ este año.

La siguiente campaña. Sería interesante que la ciudadanía pudiera conocer los avances del Plan Edificant de manera transparente. Por otra parte, el inicio del próximo curso escolar permitirá que tanto la Generalitat como los ayuntamientos, muestren los primeros resultados de este novedoso modelo de gestión de la infraestructura. Lo que nadie quiere, sobre todo el alumnado afectado, es que lleguemos a mayo de 2019 y la campaña electoral sea un dejavú de la del 2015.