Después de 16 ediciones en Italia, el Rototom Sunsplash va a repetir sede en la localidad castellonense de Benicàssim después de que el año pasado se acogiera alrededor de 150.000 personas. Para este año se ha vendido un 30% más de entradas por lo que la alcaldesa de Benicàssim, Susana Marqués, ve esta subida como un potenciador económico y social de la ciudad.
Tras la pasada edición que recaudó 7 millones de euros en el territorio, esta edición empezará el día 18 de agosto hasta el 27 del mismo mes. Los asistentes tendrán la posibilidad de acampar en el propio festival para disfrutar tanto del festival como de la ciudad.