La FAMPA Castelló Penyagolosa denuncia que la Conselleria de Educación ha impedido la oferta de aulas en valenciano en zonas castellanohablantes, a pesar de que la consulta a las familias lo avalaba. Esta decisión discrimina, una vez más, la lengua propia y vulnera los derechos lingüísticos del alumnado. Ante esta situación, exigen la retirada inmediata de la normativa y la suspensión del proceso impuesto en los últimos meses.
Varios centros de zonas castellanohablantes han recibido instrucciones de no ofrecer aulas en valenciano, aunque la consulta había determinado que era necesario hacerlo. Esto evidencia “una aplicación discrecional de la norma, una interpretación a la carta de una normativa que discrimina, como ya es habitual, al valenciano”, ha denunciado Albiol.
Esta nueva regulación es innecesaria, no ha sido demandada por la comunidad educativa y, en la práctica, es imposible de aplicar por la falta de medios y de planificación.
La FAMPA Castelló Penyagolosa ya advirtió hace un año que este cambio normativo no mejoraría el sistema educativo, sino que lo empeoraría. “Esta normativa no era necesaria, nadie la había pedido. Estábamos en un sistema educativo donde se garantizaba que todo el alumnado finalizaría la etapa obligatoria con suficientes conocimientos de valenciano, castellano e inglés. Ahora, en cambio, la Conselleria ha generado un problema donde antes había equilibrio”, ha afirmado Pep Albiol, presidente de FAMPA Castelló Penyagolosa.
Por lo tanto, exigen a la Conselleria que rectifique, que sea más empática con las familias y que garantice una educación equitativa para todo el alumnado, respetando los derechos lingüísticos y educativos. “Pedimos la retirada de esta normativa y que se deje sin efecto todo este proceso que estamos sufriendo en los últimos meses”, ha concluido el presidente de la FAMPA Castelló Penyagolosa.