La FAMPA Castelló Penyagolosa, junto con otras Asociaciones vecinales y de padres en la Comunidad Valenciana, han expresado su profunda preocupación por la reforma propuesta a la Ley del Juego, enmendada por el PP y Vox, incluida en el Presupuesto de 2024 de la Generalitat. La reforma eliminará la distancia mínima de 850 metros entre salones de juego y centros escolares, permitiendo la renovación de licencias sin cumplir con esta condición.
Proteger a los jóvenes de la ludopatía
Según la FAMPA, esta decisión contradice una ley que antes se consideraba ejemplar a nivel estatal, diseñada para proteger a los jóvenes de las adicciones al juego. La federación ha denunciado influencias de salas de apuestas y critica la "falta de consideración" hacia la protección social de la infancia y la juventud.
La ludopatía es un problema creciente, y la FAMPA argumenta que reformas como esta facilitan la "proliferación de establecimientos de juego cerca de escuelas", aumentando la vulnerabilidad de la población más joven.
Sin consenso
Además, la federación lamenta la falta de consulta con órganos educativos, como la mesa de padres y madres o el consejo escolar valenciano, en la toma de esta decisión crucial.
La FAMPA insta a no aprobar estas enmiendas, abogando por un marco jurídico que proteja a la infancia y la juventud, evitando la normalización de casas de apuestas en rutas escolares y zonas de ocio juvenil. La federación sostiene que solo deteniendo estos cambios se asegurará la seguridad y bienestar de niños y jóvenes, protegiéndolos de los impactos negativos asociados a la exposición temprana al mundo del juego y las apuestas.