ROBO

El obispo de Segorbe-Castellón denuncia la profanación de la Eucaristía en una iglesia de Castelló

Se celebrará una Santa Misa de desagravio en la iglesia de San Francisco de Asís, el próximo domingo, a las 11.30 horas

Europa Press

Castellón | 25.01.2023 14:09

El obispo de Segorbe-Castellón denuncia la profanación de la Eucaristía en una iglesia de Castelló
El obispo de Segorbe-Castellón denuncia la profanación de la Eucaristía en una iglesia de Castelló | DIÓCESIS SEGORBE-CASTELLÓN

El obispo de la Diócesis Segorbe-Castellón, Casimiro López Llorente, ha denunciado que este martes, a primeras horas de la noche, se descrubió una "grave" profanación del Santísimo Sacramenteo de la Eucaristía en la iglesia parroquial de San Francisco de Asís de Castelló.

En el transcurso del robo, concerta el obispo en un comunicado, fue sustraído el viril con el Santísimo, depositado en el Sagrario.

El obispo señala que, "con el deseo de reparar este acto sacrílego", se celebrará una Santa Misa de desagravio en la iglesia de San Francisco de Asís, el próximo domingo, a las 11.30 horas, a la que invita a todos los católicos de la Diócesis de Segorbe-Castellón -sacerdotes, religiosos y laicos-, "acompañando a los fieles de esta parroquia en este momento doloroso de su historia local".

López Llorente ha subrayado que este hecho les duele "profundamente". "Se trata de un acto sacrílego contra el mayor tesoro que tenemos los católicos: la Santísima Eucaristía, presencia real y permanente de Jesucristo entre nosotros". Por ello, como Obispo pide a los sacerdotes que en todas las iglesias parroquiales, capillas y templos abiertos al culto se lleven a cabo "actos de desagravio y de reparación" sea con la celebración de la santa Misa o con la exposición prolongada del Santísimo Sacramento.

El obispo ha exhortado a los todos fieles católicos a aprovechar lo acontecido para renovar la fe y devoción eucarísticas. "Detrás de este suceso se esconde una llamada a la conversión dirigida a cada uno de nosotros. Hagamos de este agravio una oportunidad de desagravio. Que esta ofensa sea ocasión para suscitar y manifestar nuestro amor hacia Jesucristo, presente en la Eucaristía", concluye.