La Universitat Jaume I (UJI) ha aprobado un plan de estabilización del profesorado asociado en cumplimiento de la Ley Orgánica del Sistema Universitario (LOSU), un proceso que ha generado críticas y preocupación entre los docentes temporales, que representan más del 40% del cuerpo docente.
El pasado miércoles 21 de mayo, los representantes del profesorado no permanente en el Consell de Govern, Toni Vallet (Professorat Precari al Claustre) y Paco López (MesUJi), votaron en contra de la convocatoria para estabilizar 380 plazas de profesorado asociado laboral. Vallet señaló que “a las personas implicadas les ha faltado recibir mucha información sobre el proceso, especialmente desde los representantes sindicales”. Además, expresó que “la aplicación de la LOSU no resuelve la precariedad del colectivo, sino que la agrava”.
Entre las principales preocupaciones está la reducción máxima de créditos docentes permitidos a partir del curso 2025/26, que bajará a 9 o 12 créditos, con el consiguiente descenso salarial de entre 350 y 500 euros mensuales para quienes impartían hasta 18 créditos. Vallet destacó que “se requiere una remuneración digna y proporcional al trabajo realizado, tal como han corroborado sentencias recientes”.
Asimismo, los representantes consideran que la UJI no ha aprovechado la moratoria permitida hasta 2027/28 para adaptar el proceso y evitar cambios drásticos. Vallet apuntó que “otras universidades, como la Politècnica de Catalunya, han acordado medidas que permiten mantener la dedicación actual de algunos docentes y mejorar sus condiciones”.
El concurso para la estabilización no garantiza la continuidad automática, ya que los contratos podrán extinguirse por necesidades docentes, manteniendo la incertidumbre para el profesorado. Los contratos temporales actuales vencen el 31 de agosto de 2025, y quienes no participen en el proceso no serán renovados, situación que podría derivar en demandas por despido improcedente.
Desde la Plataforma de Profesorado Asociado reconocen el “talante de escucha activa” del Vicerrector de Profesorado, Ximo Beltrán, y valoran positivamente que el plan permita que parte del personal continúe en la UJI más allá de 2025. Sin embargo, instan a la rectora Eva Alcón a “demostrar voluntad real para reducir la precariedad del colectivo, aplicando incentivos del convenio colectivo actual y avanzando en la firma del nuevo convenio”.
Professorat Precari al Claustre, candidatura independiente que agrupa a la mayoría del profesorado temporal, denuncia que “después de años de contratos concatenados en fraude de ley, esta reconversión no es una verdadera estabilización, sino una medida para maquillar la temporalidad”.