A revivir la primera gesta europea
Casi trece años después el Estadio de la Cerámica revivirá la que fuera primera gran gesta europea del Villarreal y que no es otra que la eliminatoria ante la Roma en Copa de la UEFA en la temporada 2003/04.
Aquella campaña los amarillos, de la mano de Benito Floro primero y posteriormente de la de Paquito, alcanzaron la semifinal de la entonces segunda competición europea para caer a manos del Valencia de Rafa Benitez.
En su primera participación continental los castellonenses firmaron una extraordinaria campaña tras apear a conjuntos como el Trabzonspor (Turquía), Torpedo de Moscú (Rusia), Galatasaray (Turquía), Roma (Italia) y Celtic (Escocia). Pero sin duda el golpe de mano del submarino se produjo precisamente en el doble duelo de octavos de final ante el cuadro romano, especialmente poderoso en aquella época donde llegó a conquistar el escudetto de la mano del técnico Fabio Capello. Futbolistas de la talla de Panucci, Walter Samuel, Emerson , Cassano, Montella o un Francesco Totti en su mejor momento, convertían al conjunto de la capital eterna en netamente favorito.
Pero el exceso de confianza en la ida, donde Capello prescindió de varias de sus figuras, acabo por pasarles factura. Lo cierto es que la ida se jugó en una fecha en la que nunca se debería haber disputado un partido de fútbol. Era un 11 de marzo del 2004 y aquella mañana el tristemente celebre atentado islamista en Atocha no dejaba lugar a cualquier celebración en España. Pese a ello la UEFA no atendió a la solicitud de aplazamiento y aquella noche, en un clima extraño, hubo fútbol. Con goles de Sonny Anderson y Jose Mari, y comandado por Juan Roman Riquelme, el Villarreal encaró la eliminatoria con vistas a la vuelta que se disputaría en el Olímpico una semana después. Aquel Villarreal, con futbolistas como Pepe Reina, Arruabarrena, Josico, Senna, Belletti o los citados Jose Mari, Riquelme o Anderson, era el germen del que pocas temporadas después y de la mano de Pellegrini daría el salto para convertirse en uno de los clubes más respetados de la liga y de Europa. El partido de vuelta fue especialmente duro. La Roma, ahora si, salió a por todas y tuvo contra las cuerdas al submarino al anotar dos goles en 50 minutos. Hasta que llegó el gol de Sonny Anderson, uno de los más recordados en la historia del club de la Plana para protagonizar la primera gran gesta europea de su historia.