SOLUCIÓN A LA VISTA

Gisbert ofrece a ADIF las vías interiores del puerto siempre que el ente ferroviario asuma la seguridad de la circulación

El presidente de la Autoridad Portuaria asegura que no hay inconveniente en que los trenes con destino Murcia y Cartagena hagan sus maniobras en terrenos portuarios, ante el rechazo de los vecinos y del consistorio a que se utilicen las vías de la antigua estación de Murcia

Pepe Requena | EFE

Madrid | 10.02.2021 19:15

La antigua estación de Murcia, hoy Casa Mediterráneo
La antigua estación de Murcia, hoy Casa Mediterráneo | Casa Mediterráneo

El Puerto de Alicante confirma su ofrecimiento para que los trenes de mercancías de la línea que conecta Chinchilla con Murcia y Cartagena puedan desviarse hacia el ramal ferroviario interior del recinto portuario para la realización de la maniobra de inversión de marcha si Adif asume su seguridad.

El presidente de la Autoridad Portuaria de Alicante, Juan Antonio Gisbert, ha explicado que "el Puerto le dijo automáticamente a Adif que la estación ferroviaria estaba a su servicio; el Puerto no tiene ningún inconveniente en que ese tráfico entre y salga del Puerto", ha señalado. Eso sí, ha indicado que esa posibilidad queda supeditada a "las condiciones de seguridad que tiene que garantizar Adif; si Adif lo hace, podrá trabajar sin ningún problema; la apertura del Puerto es total", ha recalcado Gisbert.

En este sentido, ha apuntado que esa seguridad está relacionada con la circulación ferroviaria. "El tráfico ferroviario debe cumplir unas condiciones de seguridad de las que se encargan unos responsables de ese tráfico y los responsables del Puerto no se pueden hacer cargo del tráfico ferroviario de Adif; de ese tráfico ferroviario se tiene que hacer cargo Adif", ha expuesto.

La polémica empezó hace unos días cuando el Administrador de Infraestructuras Ferroviarias comenzó a acondicionar las vías que acaban en la antigua estación de Murcia ya que los trenes no iban a poder usar la línea que parte de Chinchilla (Albacete) por unas obras. Asociaciones vecinales de los barrios cercanos y después el ayuntamiento expresaron su rechazo a que lo que debería ser ya un pulmón verde se convirtiera en un aparcadero de trenes, aunque fuera provisional.