roban cualquier cosa

Detenido en Alicante por robar redes de pesca valoradas en 30.000 euros para extraerles el plomo

➡️El arrestado obtuvo 1,3 toneladas de metal que fundió en lingotes

Redacción

Alicante |

Parte del plomo que la policía ha intervenido al arrestado
Parte del plomo que la policía ha intervenido al arrestado | Policía Nacional Alicante

La Policía Nacional ha detenido en Alicante a un hombre de 45 años de edad por robar 28 redes de pesca de los barcos de tres pescadores y extraer el plomo que contienen para venderlo al peso en una chatarrería. Los agentes constataron que el plomo lo obtuvo tras quemar las redes. Después, moldeó el metal en diversos lingotes para poder transportarlo con más facilidad y así dificultar su origen.

La investigación policial tuvo su inicio tras la denuncia de un pescador del puerto pesquero de Alicante en la que manifestaba que le habían sustraído 22 redes de pesca con las que faenaba. En la denuncia la víctima valoró las redes sustraídas en unos 5.600 euros.

Durante la investigación los agentes tuvieron conocimiento de otros dos robos cometidos en el mismo lugar, hechos que fueron denunciados por otros dos pescadores a los que también les habían robado un total de seis redes de pesca de grandes dimensiones, cuatro a uno de ellos valoradas entre 20.000 y 25.000 euros, y dos más al otro de los pescadores valoradas en 4.500 euros.

La policía ha detallado que el alto valor de estas redes se debe al elevado coste de fabricación y al precio de los materiales y metales con los que están confeccionadas; uno de ellos el plomo.

Tras la pista del metal

Los agentes de Policía Judicial de la Comisaría de Distrito Centro de Alicante iniciaron la investigación realizando diversas comprobaciones, entre ellas varias inspecciones en empresas de recuperación de metales en las que obtuvieron datos de las compras de plomo realizadas a particulares.

En una de las empresas figuraban 39 ventas de cantidades inusuales de plomo realizadas por un varón, espaciadas a lo largo de varios meses y que acompañaba con la venta de pequeñas cantidades de otro tipo de metales como cobre, aluminio o acero para no levantar sospechas. El total del plomo vendido ascendía a 1.351 kilos.

Además, estas ventas se iniciaron tres días después del primer robo de redes de pesca, por lo que el plomo vendido presuntamente provenía de las redes de pesca robadas y la acción por parte del investigado de espaciar la venta del plomo en diferentes días era para no alarmar al comprador sobre la procedencia del metal.

Finalmente los agentes identificaron plenamente al presunto autor de los robos que fue localizado y detenido por la comisión de un delito de hurto.

Estos robos afectaron gravemente a la economía de las víctimas, ya que las redes de pesca son aparejos muy caros sin los cuales no pueden faenar.