Desigualdad

Cáritas alerta de un aumento del 20 % en la exclusión social en Madrid por la vivienda y el empleo precario

La Comunidad de Madrid registra un aumento preocupante del 20 % en la tasa de exclusión social, según Cáritas Diocesana. El incremento de la brecha social se relaciona directamente con los elevados precios de la vivienda y la precariedad del empleo, dos problemas estructurales que agravan la situación de quienes están al límite. El 44% de las personas que acudieron a Caritas en 2024 lo hacían por primera vez, en muchas ocasiones en una situación límite

Marisa Menéndez

Madrid |

Cáritas alerta de un aumento del 20 % en la exclusión social en Madrid por la vivienda y el empleo precario
Cáritas alerta de un aumento del 20 % en la exclusión social en Madrid por la vivienda y el empleo precario | Europa Press

Cáritas Diocesana de Madrid atendió durante 2024 a 106.382 personas, un 44 % de ellas por primera vez. La organización alerta de un aumento del 20 % en la tasa de exclusión social en la región y subraya que los efectos de la crisis habitacional y del empleo precario están detrás del incremento de la desigualdad. “Los avances económicos no están llegando a quienes más los necesitan”, advirtió la directora adjunta de la entidad, Carmen Polo, durante la presentación de la memoria anual que además alertó de los precios "compartir una cama cuesta 400 euros"

Con una inversión de más de siete millones de euros, Cáritas ofreció 25.796 ayudas directas: el 58 % de ellas destinadas a alojamiento temporal o vivienda. Según el informe, el precio de la vivienda en Madrid se ha duplicado en la última década, dificultando el acceso y la permanencia de las familias con menos recursos. A esto se suma la precariedad laboral, que no garantiza una salida de la pobreza. “Hay quienes acceden al mercado laboral, pero sin condiciones que les permitan cubrir sus necesidades básicas”, denunció Polo. Además, el 30 % de las personas atendidas fueron menores de edad, lo que evidencia el impacto de la pobreza en la infancia y sus consecuencias a largo plazo. La mayoría de los hogares acompañados son familias monomarentales, numerosas o migrantes, perfiles especialmente expuestos a la exclusión.

La entidad destaca también su labor en el acompañamiento a personas mayores en soledad no deseada, con más de 1.000 beneficiarios, y el refuerzo de proyectos como San Felipe Neri, destinado a atender a personas sin hogar con problemas de salud mental. En total, se desarrollaron 418 proyectos en 374 Cáritas parroquiales, con el apoyo de 9.323 personas voluntarias y más de 24.000 donantes.

Con estos datos, Cáritas vuelve a poner sobre la mesa la urgencia de políticas públicas que garanticen el derecho a una vivienda digna y a un empleo estable. “La brecha social es cada vez más intensa, con gente más rica y gente más pobre. No podemos dejar a nadie atrás”, concluyó Polo.