"Pá comerse Madrid" con Isabel Aires

Recomendaciones gastronómicas para mayo

Cómo va ya mayo avanzando sigilosamente... Es un mes que me gusta mucho, aunque espero con ansia ya más calorcito y días de sol. Para sobrellevarlo, nada como ‘exprimir’ el calendario y todo su sabor con productos que hablan de temporada, de tradición y de innovación a la par. Por eso hoy en Pá Comerse Madrid, hacemos unas ‘pildorillas gastronómicas’ para estar enterados de todo lo que ‘se cuece’.

Isabel Aires

Madrid |

Y comienzo con un nuevo producto que no se van a resistir ni las violeteras del cuplé en comprar. Porque ha salido un nuevo vermú al mercado que ya está siendo objeto de deseo para los vermuteros a los que les gusten los caramelos tan castizos de violetas: el Vermú ahumado de violetas de la empresa alcalaina Licores Trampero. Detrás del proyecto están José López y su mujer Paula Esteban, junto con Jorge Rea, investigador del IMIDRA. Está elaborado íntegramente con materias primas de origen local, se han utilizado hasta 12 botánicos autóctonos de la sierra, los característicos caramelos de violetas y vino blanco seleccionado de la comunidad. Es por ello que tiene el sello de M Producto de Calidad, y cuesta 12,50€ bajo el nombre Complvuto. Se puede comprar en tiendas especializadas, un par de conocidos hipermercados o en su página web https://trampero.com/

Y llega a Madrid Mendrugo, la primera cervecería artesanal que elabora cerveza con pan duro como ingrediente principal para elaborar sus cervezas. Un proyecto innovador que apuesta por la economía circular, la producción local y la lucha contra el desperdicio alimentario. Ubicado en la calle Campoamor, 13, en el barrio de Las Salesas, es una iniciativa de Cervezas Mica en Aranda de Duero y Pascual Innoventures. Es un espacio moderno de taproom done se sirven tanto las cervezas Mica como la propia Mendrugo directamente de grifos. Bajo el lema ‘no sabe a pan’, está hecha sustituyendo alrededor del 50% de la malta por pan duro recogido en puntos cercanos, para evitar el desperdicio alimentario. Este bar está pensado para los amantes de la cerveza artesanal que buscan conocer el origen y la historia que hay detrás, por lo que se realizarán actividades de ocio, catas, charlas, maridajes… Están elaborando una carta de platos que mariden bien con estas Pilsen y Pale Ale, para hacer completa la experiencia.

Y hablando de pan, y aquí sí que sabe, y mucho, esta semana he probado unos panes magníficos que, aunque no son de Madrid merece mucho la pena conocerlos, porque además llegan a domicilio directos desde Fromista, Palencia. Hablo de Panadería Salazar. Detrás, la historia de una saga de panaderos que comenzó en el s. XIX en las esclusas del Canal de Castilla. Al frente se encuentra César Salazar, quinta generación de panaderos, que continúa con la tradición y la elaboración artesanal con más de 100 productos, manteniendo el legado de su tatarabuela Petronila, su bisabuelo Feliciano, su abuelo Julio y su padre José María. Los panes son los reyes de la casa, cada uno con una elaboración y proceso. De espelta, tritordeum (cereal resultante de cruzar de trigo y cebada) con semillas de amapola; de pasas y nueces; de aceitunas; y el imprescindible de Candeal, entre otros. En la parte dulce, los sequillos o las Rosquillas de palo, por ejemplo, saben a tradición en cada bocado. Están a la venta en la tienda on line https://panaderiasalazar.es/.

Ya decía la canción que ‘vaya vaya, aquí no hay playa’, y algo que no podemos tener de Km 0, a pesar de estar tan crecidito el Manzanares con las lluvias, es pescado, o el que está en plena temporada con la pesca de almadraba, el rey de los mares, el Atún rojo. Así que me voy a ir hasta el bar-restaurante Ponzano, en Ponzano 12, de mis queridos Paco y Melania, porque hasta el 29 junio se están celebrando la decimosegunda edición de las jornadas que homenajean a este preciado túnido. Con las recetas más suculentas, elaboradas con cortes prácticamente del morro a la cola, como el Salmorejo con atún rojo marinado; Migas de atún rojo con aceite picual; Tartar con guacamole; encebollado, con curry rojo, a la parrilla, en albóndigas, estofado, con salsa de tomate y huevo; o incluso su curioso chuletón hecho al carbón. Porque lo mejor para saborearlo, con una materia prima de excepción como tenemos aquí, es tomarlo con poca elaboración.