La Sala de lo Social del Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA) ha concedido, según avanza Diario de Sevilla,una pensión de viudedad y orfandad a la mujer y a los dos hijos de un yihadista de Ceuta de 33 años que se inmoló en 2012 en un cuartel de Siria.
El yihadista, que trabajaba como taxista, formaba parte de la banda terrorista Al Qaeda y en junio de 2012 acabó con la vida de 130 personas en Siria. Un "acto de martirio", según explicó el terrorista en su cuenta de Facebook.
El atentado ocurrió el 1 de junio de 2012 en el campamento militar de Iblib, en Siria, tras lanzar un camión con explosivos que provocó la muerte de 130 personas y varios heridos.
La Seguridad Social defiende la pensión para la viuda y sus hijos
La Audiencia Nacional determinó que el taxista había desaparecido en abril de 2012, aunque en el Registro Civil quedó indicado el 1 de marzo de 2017. Por ello, la Seguridad Social, que no se negó a conceder estas pensiones por las "execrables circunstancias en que se produjo el fallecimiento", defendió que estas ayudas debían computarse atendiendo a dicha fecha.
A este respecto, argumentó que el yihadista no cumplía con el mínimo de años cotizados, pues en 2013 fue dado de baja a raíz de una Inspección de Trabajo.
La mujer y los hijos del yihadista tienen derecho a una pensión
Así, la justicia andaluza ha dictado que tanto la mujer como los dos hijos del yihadista tienen derecho a acceder a la pensión. No obstante, considera que la fecha de la muerte que debe computar no es la recogida en el Registro Civil, sino la señalada por la Audiencia Nacional.
Según el citado medio de comunicación, el autor del atentado, que se casó en 2009, cotizó desde julio de 2004 por cuenta ajena y desde 2008 como autónomo.
