LA SIGNATURA

El Torneo de la regularidad

Dice Carlo Ancelotti, que la diferencia real entre el Barcelona y el Real Madrid no es la que existe en la clasificación de 11 puntos antes de que se dispute la jornada de hoy. Y que todo se decide o lo marcan los pequeños detalles. Parece un análisis muy simplista por la parte de un hombre con tanto fútbol a sus espaldas y un fácil intento de justificar su discreta liga.

Alfredo Martínez

Catalunya | 25.04.2023 09:07

No hay que olvidar que Carlo Ancelotti, que cuenta con una grandísima trayectoria a nivel internacional y que ha entrenado los mejores equipos del mundo posee un enorme palmarés en las competiciones europeas donde casi siempre ha competido hasta las últimas rondas y ha ganado varias ligas de campeones, pero en proporción ha evidenciado, que no es un entrenador que sepa dirigir a los equipos en los torneos de la regularidad. Apenas ha ganado algunas ligas, a pesar de haber entrenado al Chelsea, al Real Madrid, varias etapas al Milan y equipos muy poderosos del concierto internacional, como el PSG.

La Liga se llama claramente torneo de la regularidad. Son 38 jornadas y otras tantas semanas en las que se juega el partido a partido todos contra todos en campo propio y en campo rival.

En las mismas condiciones, sin ventajas para ninguno, si acaso algún pequeño matiz de un día más de descanso, pero en otro caso de menos y por tanto en igualdad absoluta de condiciones.

Hay tantos elementos y tantos factores que entran en juego que hablar de pequeños detalles cuando estamos nombrando a dos equipos poderosísimos con un presupuesto infinitamente superior al del resto de los rivales, excepción hecha del Atletico de Madrid, y que casi compiten solos entre ellos no parece la mejor definición. Igual que el Barcelona ha hecho una liga sensacional y extraordinaria con una gran regularidad y unos números que le llevan camino de los 100 puntos, el brillante Real Madrid de Europa se dejó ir en la liga después de ganar al Barcelona en el Santiago Bernabéu marchándose ya al mundial de Catar por detrás en la clasificación y retomando después del mundial con unas discretas actuaciones.

El Madrid ha dejado muchos puntos en muchos campos y eso no es cuestión de pequeños detalles señor Ancelotti, es cuestión de que no compitió con la suficiente profesionalidad, como lo hizo el Barcelona, que respetó a todos y cada uno de sus rivales, y que en algún punto pudo haber tenido un poco más de suerte que en otros, pero también en otros partidos, no tuvo tanta fortuna y se dejó puntos que parecía que tenía virtualmente ganados, como por ejemplo en el Camp Nou en el choque frente al Español que terminó empatando por el único ataque que hicieron los blanquiazules y un penalti, claro, penalti ingenuo que cometió Eric Garcia y que transformó Joselu en el empate final.

No creo que Ancelotti pretenda menospreciar el título de liga del Barcelona porque a la par estaría quitando valor a su trabajo como entrenador que posee una muy buena plantilla y que está muy pero que muy lejos del título de liga, sino que trata de justificar porque su equipo ha tirado La liga tan pronto y está tan lejos de competir, la de su único gran rival.

La clasificación como el algodón, no engañan y reflejan la realidad de lo ocurrido a largo de ya más de 30 partidos de liga.