A pesar de la presión inflacionaria, el sector no contempla aumentar los precios y fía el éxito de esta jornada en la tradición del público y a la llegada de turistas. Además, al caer en domingo, el sector celebra que las ventas de rosas se alarguen durante cuatro o cinco días. Además, tanto libreros como floristas podrán instalar paradas en la calle entre el viernes 21 y el domingo 23.
El sector también ha recordado que es una buena noticia que Sant Jordi se celebre tras la Semana Santa, ya que, según la presidenta de Mercabarna, Montserrat Ballarín, "los barceloneses se quedarán en la ciudad y favorecerá la llegada de visitantes del resto de Catalunya". Además, elementos como la 'Superilla literaria' o las puertas abiertas de muchos monumentos sumarán atractivo a una jornada que los floristas marcan en rojo en sus calendarios.
Cabe recordar, que en Sant Jordi, se venden un tercio de las rosas anuales en Catalunya. Por el momento, las previsiones son buenas, ya que des de Mercabarna han asegurado que los encargos se mantienen estables comparados con años anteriores, sin tener en cuenta en año de la pandemia.
Origen y novedades
La rosas de importación siguen manteniendo su total hegemonía. Colombia se mantiene como el primer proveedor de rosas para Sant Jordi, representando el 62% del total. Le siguen Ecuador y Holanda. Las flores de producción local únicamente representan un 3% de la ventas. Actualmente los principales puntos de explotación son el Maresme y Tarragona.
Las variedades más populares serán de nuevo las rosas rojas. Pero paralelamente, tonalidades como el lila, violeta o moradas también se han ganado un espacio sobre todo entre los consumidores más jóvenes. Siguen manteniendo la tradición, per la adaptan a las nuevas preferencias por los adornos naturales hechos de papel, madera o cartón.
