LA SIGNATURA

Los internacionales españoles del Barcelona

La primera lista de jugadores convocados por Luis De La Fuente tenía un morbo especial y un atractivo para ver cuánto de ruptura había con respecto a la época del anterior seleccionador Luis Enrique. La base de la misma era claramente el Barcelona, que llegó a tener ocho futbolistas entre los citados y que ha pasado ahora a tener entre lesiones y otros aspectos apenas dos jugadores en la convocatoria, no siendo ni siquiera el club más representado entre todos.

Alfredo Martínez

Catalunya | 23.03.2023 10:46

Cada entrenador y cada seleccionador tiene su gusto evidentemente y por tanto, es muy respetable lo que haya decidido elegir el nuevo seleccionador para el futuro de la roja. Ha roto absolutamente con los moldes anteriores y ha prescindido de mucho de la guardia pretoriana del anterior técnico.

Es una ruptura total, no hay una transición con lo cual se evidencia un cambio de guardia absoluto y posiblemente de estilo. No será una selección en la que el líder sea el seleccionador, sino un equipo de futuro remozado en el que quizás echo en falta algo de personalidad y de peso en los jugadores. Ya no quedan campeones del mundo. Ya no quedan jugadores con mucha veteranía. Se ha prescindido con el riesgo que supone además del renunciado Busquets, de hombres como Koke o Jordi Alba incluso Ramos que le podían dar galones al grupo. Falta esa veteranía y esa mezcla, pero por contra hay mucha juventud que a buen seguro en unos años será muy importante en el concierto futbolístico mundial.

Y en esa lista novedosa tan solo dos jugadores del Barcelona, curiosamente los dos más jóvenes. Es evidente que de no haber estado lesionado Pedri, el tercero más joven, habría sido uno de los líderes de este grupo, pero la inoportuna lesión que le tiene lastrado desde hace tiempo imposibilita que esté en el nuevo grupo.

Está claro que Alejandro Balde se ha hecho con un sitio en el lateral izquierdo no solo del Barcelona sentando al omnipresente Jordi Alba, un jugador de muchísimo peso en el fútbol español y en el Barcelona en los últimos tiempos, sino también al veterano Marcos Alonso.

Y es que es lateral hispano dominicano es todo un hallazgo futbolístico y un jugador cuya progresión aún desconocemos, pero que le puede llevar a ser un futbolista de época.

Y luego está el caso particular de Gavi. Un jugador absolutamente diferente a todos, especial, insultantemente joven y que ha irrumpido con un empuje y una fuerza desproporcionada en el mundo del fútbol europeo. Ha ganado todos los galardones del trofeo bravo, El Golden Boy, el Kopa y ha sido reconocido por propios y extraños como uno de los mejores descubrimientos del fútbol europeo en el último trienio.

Seguimos hablando de un joven de tan solo 18 años que está rompiendo todas las barreras y todo el registros habidos y por haber y cuyo límite no se conoce. Ahora está en el ojo del huracán por su estilo de juego y su ímpetu futbolístico.

Todos le querrían tener en su equipo, pero muchos le padecen enfrente, le sufren y le critican. Es verdad que en algún momento podría reprimirse algo a la hora de algunas acciones que le cuestan tarjetas absurdas o faltas innecesarias, pero da la sensación de que es su estilo de juego, de que es inherente a su forma de jugar y que bajar un poco ese ímpetu no sería el mismo centrocampista, agresivo, completo y total que vemos partido tras partido.

Pulir algunos detalles, corregir otros con el paso de los tiempos, porque no en vano no deja de ser un futbolista en edad todavía de juvenil que lleva casi ya dos años compitiendo en la élite. Para mí Gavi es una bendición para el Barcelona, una bendición para el fútbol español, una bendición para el fútbol y por tanto, dejemos de desarrollar en los terrenos de juego, no limitemos su estilo de jugar Gavi es grande por cómo es.