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El fallo del penalty

La imagen de los jugadores del Barcelona en el lanzamiento del penalti cometido por manos de Guillamon al comienzo de la segunda parte, no fue nada edificante y desde luego perjudicó al desenlace final y al fallo por parte de Ferran Torres de la pena máxima.

Alfredo Martínez

catalunya | 07.03.2023 10:59

Podemos hablar de si Ferran Torres pudo ser más generoso con Ansu Fati cuando éste le pide el balón , pero estaremos de acuerdo todos que el delantero hispano guineano sabía que le correspondía lanzamiento al jugador valenciano y por tanto, ya generó una situación incómoda en el terreno de juego a su compañero y a la propia Grada.

No sabemos si Ferran hubiera marcado si Ansu no le genera un poco más de presión, pero lo que sí sabemos es que con esa presión añadida un lanzador con bastante fiabilidad, marró el penalti y complicó considerablemente el desenlace final del partido.

Estaba todo escrito y decidido desde el vestuario de tal manera que las cartas estaban marcadas y cada uno sabía cuál era su papel al empezar el partido.

Es cierto que luego entró en el terreno de juego Kessie, que es el segundo lanzador del equipo cuando está en el terreno de juego y también es cierto que todo se trata de sensaciones y si Ansu Fati tenía muy buena sensaciones está en su derecho de pedir el lanzamiento pero genera una situación incómoda si al final su compañero que cree que está en condiciones de marcar opta por ser el que lo lance.

Es evidente que con Robert Lewandowski en el campo no habría habido este debate y el centro delantero polaco habría sido el encargado de ejecutar la pena máxima y si Kessie está desde el inicio del partido lo habría hecho este. Creo que el marfileño en el Milan tuvo unas actuaciones destacadas y era el lanzador oficial de Penas máximas con un gran índice de acierto. Al africano Le honra no entrar en la disputa de lanzar el penalti pues la imagen hubiera sido si cabe aún peor.

Tenemos que partir de la base que el cuerpo técnico y los propios jugadores al ensayar penaltis en las distintas sesiones preparatorias, conocen las virtudes y calidades de cada uno de los lanzadores y por tanto, no está escogido a lazar quien tiene más probabilidades de materializar el gol. Y ellos lo saben, pero también es cierto Que jugadores como Ansu, valientes y lanzados, se ven capaces y necesitan el empujón anímico que significa marcar un gol para un delantero y máxime cuando lleva demasiado tiempo sin ver puerta, desde el gol en la semifinales de la supercopa ante el Betis. Demasiado tiempo. La lucha por la titularidad entre Ferran y Ansu es otro elemento de discordia, pues ambos saben que el éxito del uno penaliza al otro a la hora de tener más minutos o titularidades en el equipo no son titulares indiscutibles y luchan por los minutos que puedan tener y que le puedan dejar el resto de los delanteros más habituales.

Lo cierto es que al final perdió el equipo porque falló el penalti, porque su imagen no fue buena, y la imagen de los dos jugadores también quedó dañada. Ferran recibió pitos por parte de la grada que a buen seguro no era lo que pretendía Ansu Fati cuando le pidió lanzar la pena máxima. También creo que de haber estado el entrenador Xavi Hernandez en el banquillo habría sido todo mucho más rápido y más sencillo pues el egarense habría tomado una decisión rápida para evitar la confrontación entre los compañeros. Sin Lewandowski debe tirar los Kessie y sin Kessie Ferran, que por suerte es un gran lanzador y luego Ansu Fati, y sobre todo respetar lo que dice el vestuario, lo que dice el entrenador en el camerino y si no se está de acuerdo se debate antes dentro del vestuario y no se irrita a la grada en una situación incómoda y molesta para todos.