Cataluña abre la puerta a la reproducción asistida a mujeres solas y lesbianas

Cataluña cuenta con un nuevo protocolo de reproducción humana asistida que abre la puerta a todas las mujeres, independientemente de su orientación sexual, para lo que ampliará de 8 a 15 o 20 el número de centros sanitarios en los que se podrá realizar el tratamiento.

El conseller de Salud, Antoni Comín, y representantes de ocho colectivos de gais, lesbianas y feministas han presentado en rueda de prensa en Barcelona el nuevo protocolo, que surge de la Ley para garantizar los derechos de lesbianas, gais, bisexuales, transgénero y contra la homofobia, aprobada por el Parlament de Cataluña en 2014. El protocolo supondrá la ampliación del número de centros sanitarios en los que se realizan inseminación artificial, en función de la demanda que se registre a partir del lunes día 11, y que el departamento estima que puede oscilar entre 10.000 y 36.000 mujeres lesbianas de 18 y 40 años.

Actualmente, son ocho los hospitales públicos en los que se hacen tratamientos de inseminación artificial: el Josep Trueta (Girona), con 102 mujeres tratadas en 2015; Hospital del Mar (Barcelona), 350 tratamientos realizados el mismo año; Fundación Puigvert (Barcelona), 500; Clínic (Barcelona), 178; Joan XXIII (Tarragona), 20; Verge de la Cinta (Tortosa), 31; Can Ruti (Badalona), 10; y Vall d'Hebron (Barcelona), 60. También se contempla la creación de un banco público de gametos para hacer frente a la nueva demanda de inseminación artificial, ha explicado el conseller. El protocolo llega después de que una cincuentena de asociaciones y colectivos de gais, lesbianas y feministas se unieran para reclamar la implementación de la ley aprobada en 2014.

Según datos de Salud, actualmente se destinan un total de 8,5 millones de euros a tratamientos de reproducción, ya sea inseminación artificial, el más sencillo, o fecundación in vitro, que es más complejo, en centros públicos. Se desconocen los tratamientos que se realizan en los 36 centros privados autorizados en Cataluña, si bien éstas pueden ser mucho más elevadas que las de los públicos, según fuentes del sector.