Coronavirus

Satse denuncia la deficiente gestión de la gerencia de servicios sociales en Palencia

Tras la primera fase de la pandemia y en plena segunda ola, las plantillas se mantienen igual, sin refuerzos o reducidas por la falta de sustitutos.

Onda Cero Palencia

Palencia |

Enfermeras trabajando en un hospital. | EFE

En un comunicado, SATSE afirma que "desde mucho antes de que surgiera el COVID-19, el Sindicato de Enfermería viene denunciando la situación de discriminación y maltrato que sufre la enfermería en la Gerencia de Servicios Sociales. Profesionales cuya responsabilidad es la atención a nuestros mayores y familiares de especial vulnerabilidad, ven día tras día que su trabajo no se valora ni se reconoce. Si trabajas como enfermera en la Gerencia de Servicios Sociales, tu experiencia puntúa menos, tu sueldo es menor, tu jornada laboral tiene más horas, a pesar de las sentencias habidas, no existe aún el reconocimiento de la continuidad asistencial, no se actualiza su bolsa de empleo y las contrataciones nuevas suponen unos trámites tan largos e inútiles, que cuando se hacen efectivos, ha cambiado el motivo del contrato y hay que empezar de nuevo."

la nota de prensa enviada a los medios de comunicación continúa afirmando que "con la pandemia, todas estas carencias han salido a la luz. Ha sido necesario el trabajo excepcional de los profesionales para que nuestros mayores y familiares de especial vulnerabilidad, sean atendidos con seguridad y calidad. Durante los primeros meses, estas profesionales asumieron nuevas responsabilidades y tareas sin desatender las habituales. A duras penas han podido descansar o coger vacaciones. Sin embargo, la Gerencia de Servicios Sociales demuestra no haber aprendido nada. Los problemas en esta segunda ola, son los mismos que en la primera y, cada vez, más difíciles de resolver. La falta de refuerzo en la plantilla, la dificultad para contratar por los trámites administrativos, las condiciones laborales nada competitivas y la falta de profesionales que se sufre a todos los niveles en la provincia, suponen que, la plantilla de enfermería de nuestras residencias de mayores y dependientes, como el CAMP en Servicios Sociales, no van a poder conciliar su vida familiar. Las incidencias inevitables como bajas por enfermedad propia o de familiares supondrán una mayor sobrecarga sobre las compañeras por la falta de sustitutos".

Las enfermeras de Centros y Residencias de Servicios Sociales están cansadas de que ni ellas, ni su trabajo, sea valorado. SATSE critica que se sigan cometiendo “los mismos errores de siempre”; en verano podría haberse paliado esta situación mejorando las condiciones laborales, manteniendo y fidelizando los contratos de verano.

El Sindicato de Enfermería acusa a la Gerencia de Servicios Sociales de volver a priorizar intereses económicos en lugar de mejorar la atención sanitaria en nuestros Centros y residencias de mayores. No reconocen el excepcional esfuerzo de unos profesionales que trabajaron con poca seguridad, bajo presión y sufrimiento en la primera ola del Coronavirus.

Ante esta realidad, el Sindicato de enfermería considera que, es por culpa de la propia Gerencia de Servicios sociales que no haya profesionales suficientes para atender y cuidar a nuestros mayores y familiares en situación de especial vulnerabilidad. Está en su mano conseguir que haya enfermeras y enfermeros dispuestos a trabajar en sus plantillas. Los efectos de una mala gestión tendrán graves consecuencias en todos los Centros. El aumento de la mortalidad no es solo consecuencia del COVID, múltiples estudios científicos demuestran que las bajas ratios enfermeras/paciente suponen un riesgo directo sobre la vida de los ciudadanos, aumentando de forma clara su mortalidad y morbilidad, además de suponer a la larga, un incremento del coste sanitario por el consumo de otros recursos.