(ICAL) El parque eólico Las Tadeas, operado por Capital Energy y que se ubica en los municipios palentinos de Cardeñosa de Volpejera y Paredes de Nava, participa en el proyecto europeo AIRE, una iniciativa que estudiará el flujo atmosférico integrando condiciones climáticas reales. Esta iniciativa, financiada por el programa Horizonte Europa de la Comisión Europea, diseñará modelos numéricos avanzados que actuarán como catalizadores para el crecimiento de la energía eólica y, por lo tanto, apoyará los compromisos de descarbonización de la Unión Europea, según fuentes del sector consultadas por Ical.
CENER, el Centro Nacional de Energías Renovables de España, lidera esta iniciativa en colaboración con otros diez socios de seis países europeos diferentes que también participan. Este proyecto fomentará el conocimiento sobre los impactos atmosféricos en los sistemas de producción de energía eólica, y proporcionará herramientas avanzadas de diseño y simulación para maximizar la eficiencia global de esta energía a pesar de las condiciones meteorológicas.
Uno de los principales objetivos de la UE para la transición energética de 2050 es lograr un cambio estructural a largo plazo en los sistemas energéticos que reduzca los costes y aumente la producción de energías renovables. Para ello, la UE ve en el fomento de la energía eólica una de las mayores oportunidades en el sector de las energías renovables. Sin embargo, los aerogeneradores y parques eólicos convencionales “se diseñan normalmente utilizando condiciones de viento y casos operativos estándar, por lo que estos modelos no tienen en cuenta la física y la aerodinámica de los flujos de viento atmosférico a gran altura ni condiciones meteorológicas como las precipitaciones y la bruma, que pueden afectar gravemente a la capacidad de producción de la turbina”, según las mismas fuentes.
De hecho, actualmente se desarrollan aerogeneradores de mayor tamaño, que utilizan nuevos materiales y operan a mayor altitud, lo que también aumenta la superficie expuesta a los elementos y el nivel de altitud en el que se producen estas interacciones atmosféricas. Esto implica una mayor necesidad de comprender claramente el impacto de los fenómenos atmosféricos para evitar ineficiencias que podrían mermar la mayor capacidad de producción.
Para alcanzar los objetivos de producción energética fijados por la UE, es crucial comprender el impacto del flujo atmosférico a mayor altitud y en terrenos complejos, en correlación con los datos sobre viento y precipitaciones. Estos datos garantizarán que la ubicación de los parques eólicos y las turbinas elegidas se seleccionen adecuadamente para proporcionar la mejor eficiencia. Sólo entonces se comprenderá plenamente el potencial económico de los parques eólicos a lo largo de su vida útil.
Nuevos modelos
Para hacer frente a esta situación, se ha puesto en marcha el proyecto europeo de investigación AIRE (Advanced study of the atmospheric flow Integrating REal climate conditions), liderado por CENER, para desarrollar novedosos modelos numéricos y crear herramientas que pretenden comprender e integrar la física y los impactos aerodinámicos de los flujos de viento atmosféricos y la influencia de las precipitaciones en el diseño, la durabilidad y el rendimiento de aerogeneradores y parques eólicos.
Los modelos se crearán a partir de datos reales proporcionados por ocho emplazamientos objeto de estudio, cuatro experimentales (Alaiz y Gran Canaria, en España; Levenmouth, en Escocia; y Roskilde, en Dinamarca) y otros cuatro parques eólicos comerciales (España, Francia, Italia y Escocia). La validación de los modelos se llevará a cabo en cinco estudios de casos en tres emplazamientos climáticos y geográficos (gran altitud, terreno complejo y alta mar) basados en los parques eólicos comerciales utilizados para la recopilación de datos.
En los próximos cuatro años, el proyecto AIRE tendrá una influencia sustancial en permitir a los promotores de parques eólicos seleccionar los diseños de aerogeneradores y el control de parques eólicos óptimos; disminuir el riesgo para los inversores en parques eólicos, fomentando más inversiones en el sector; reducir el coste de fabricación y explotación de la energía eólica; y un mejor control de la erosión mediante medidas de mitigación.
Las Tadeas
Las Tadeas es el primer parque eólico operativo de Capital Energy en Castilla y León. En concreto, la producción de esta instalación renovable cuenta con 39 megavatios de potencia instalada y ascendió en 2021 a casi 135 gigavatios hora. La energía limpia generada por los once aerogeneradores de Las Tadeas evita la emisión a la atmósfera de alrededor de 50.000 toneladas de monóxido de carbono.
Capital Energy inauguró este primer parque eólico en la Comunidad autónoma en junio de 2021, una instalación que tiene un impacto económico anual en las arcas regionales (medidas compensatorias medioambientales) y locales (IBI e IAE), así como a través de los contratos de arrendamiento, de más de 330.000 euros. A esta cuantía recurrente se suma el pago puntual del ICIO, que ascendió a 850.000 euros.
La energética española nacida hace dos décadas considera Castilla y León un punto neurálgico del proyecto de energías limpias de Capital Energy. No en vano, la empresa desarrolla 46 proyectos renovables en la Comunidad, que suman una potencia instalada conjunta superior a los 3.300 megavatios, más de 2.800 eólicos y cerca de 500 solares. La construcción de toda esta cartera implicaría una inversión global de más de 3.000 millones de euros, así como la creación de casi 11.000 puestos de trabajo directos, una aportación fiscal de más de 60 millones en la fase de construcción y una contribución al PIB de 850 millones.
Durante la operación y mantenimiento de estas instalaciones, Capital Energy da empleo estable y de calidad a alrededor de 420 profesionales y generaría un impacto económico anual, vía impuestos locales y regionales, de unos 14,5 millones de euros. También aportaría al PIB, cada año, más de 85 millones.
Planta de hibridación
En octubre de 2022, además, el Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico (Miterd) concedió el informe ambiental favorable por la vía acelerada a Capital Energy para la construcción de una planta fotovoltaica de 49,7 megavatios (MW) que se levantará en terrenos cercanos a este parque eólico en la Comunidad. En su conjunto, esta instalación se convertirá en el primer proyecto de hibridación que el grupo de renovables impulsará en la Comunidad.
La planta fotovoltaica alcanzará una inversión de 29 millones y los 49,7 megavatios (MW), y con esta concesión en la tramitación, Capital Energy sólo estaría a falta de obtener la autorización administrativa de construcción, que habilitará al grupo energético a solicitar la licencia de obras e instalación. Capital Energy estima que podría iniciar la construcción de esta planta fotovoltaica a lo largo del primer trimestre de 2023.
La planta fotovoltaica se denominará Las Tadeas, al igual que el parque eólico, y será capaz de generar 97.000 megavatios hora (MWh) al año de electricidad limpia, el equivalente al consumo de unos 38.000 hogares castellanos y leoneses, lo que implica evitar la emisión a la atmósfera de cerca de 36.000 toneladas de CO2.
Su construcción propiciará la creación de, aproximadamente, 105 puestos de trabajo durante los periodos punta de las obras. En la fase de operación y mantenimiento, dará empleo permanente a tres profesionales de la zona y contribuirá también a generar otros tres puestos de trabajos indirectos.
Por otro lado, aportará, cada año y a lo largo de toda su vida útil, más de 150.000 euros a las arcas locales y contribuirá al PIB con un millón de euros. A esta cuantía recurrente se sumará el pago puntual del ICIO, que superará los 500.000 euros.
Con el desarrollo de esta planta solar, “Capital Energy vuelve a poner de manifiesto su compromiso con Castilla y León” y con los dos municipios palentinos, con los que ha firmado sendos convenios ligados a su Proyecto Territorios y que ya se benefician del efecto tractor del parque eólico Las Tadeas.